Sunday, December 01, 2024

Buenas Noticias con José Antonio Pagola: Sin matar la esperanza


Jesús fue un creador incansable de esperanza. Toda su existencia consistió en contagiar a los demás la esperanza que él mismo vivía desde lo más hondo de su ser. Hoy escuchamos su grito de alerta: «Levantaos, alzad la cabeza; se acerca vuestra liberación. Pero tened cuidado: no se os embote la mente con el vicio, la bebida y la preocupación del dinero».

Las palabras de Jesús no han perdido actualidad, pues también hoy seguimos matando la esperanza y estropeando la vida de muchas maneras. No pensemos en los que, al margen de toda fe, viven según aquello de «comamos y bebamos, que mañana moriremos», sino en quienes, llamándonos cristianos, podemos caer en una actitud no muy diferente: «Comamos y bebamos, que mañana vendrá el Mesías».

Cuando en una sociedad se tiene como objetivo casi único de la vida la satisfacción ciega de las apetencias y se encierra cada uno en su propio disfrute, allí muere la esperanza.

Los satisfechos no buscan nada realmente nuevo. No trabajan por cambiar el mundo. No les interesa un futuro mejor. No se rebelan frente a las injusticias, sufrimientos y absurdos del mundo presente. En realidad, este mundo es para ellos «el cielo» al que se apuntarían para siempre. Pueden permitirse el lujo de no esperar nada mejor.

Qué tentador resulta siempre adaptarnos a la situación, instalarnos confortablemente en nuestro pequeño mundo y vivir tranquilos, sin mayores aspiraciones. Casi inconscientemente anida en nosotros la ilusión de poder conseguir la propia felicidad sin cambiar para nada el mundo. Pero no lo olvidemos: «Solamente aquellos que cierran sus ojos y sus oídos, solamente aquellos que se han insensibilizado, pueden sentirse a gusto en un mundo como este» (R. A. Alves).

Quien ama de verdad la vida y se siente solidario de todos los seres humanos sufre al ver que todavía una inmensa mayoría no puede vivir de manera digna. Este sufrimiento es signo de que aún seguimos vivos y somos conscientes de que algo va mal. Hemos de seguir buscando el reino de Dios y su justicia.

José Antonio Pagola

Grupos de Jesús

Música TIEMPO DE ESPERANZA. Salomé Arricibita

 


Esperad, no os canséis de buscar
velad, porque por fin vendrá
¿no notáis que crece ya
la luz, la vida, la humanidad?

Derribad cada muro y alzad
vuestros brazos para abrazar
allanad los caminos
dejad al corazón hablar

DESPERTAD, ES TIEMPO DE ESPERANZA
YA AMANECE Y LA LUZ NOS ALCANZA
YA ESTÁ AQUÍ, CON SU PAZ
YA ESTÁ AQUÍ EL AMOR QUE NOS SALVA (bis)

Alejad el miedo a cambiar
levantad los ojos más allá
atreveos a desear
la luz, la vida, la humanidad

Hay que alzarse para caminar
hay que vivir para aprender a amar
hay que empezar a gritar
que en nosotros, Dios, habita ya

DESPERTAD, ES TIEMPO DE ESPERANZA
YA AMANECE Y LA LUZ NOS ALCANZA
YA ESTÁ AQUÍ, LA VERDAD
YA ESTÁ AQUÍ EL AMOR QUE NOS SALVA (bis)

YA ESTÁ AQUÍ, CON SU PAZ
YA ESTÁ AQUÍ, EL AMOR QUE NOS SALVA

 

Salomé Arricibita

LECTURAS PARA EL EL lUNES 2 DE DICIEMBRE


Primera lectura

Lectura del libro de Isaías 2, 1-5

Visión de Isaías, hijo de Amós, acerca de Judá y de Jerusalén.
En los días futuros estará firme
el monte de la casa del Señor,
en la cumbre de las montañas,
más elevado que las colinas.
Hacia él confluirán todas las naciones,
caminarán pueblos numerosos y dirán:
«Venid, subamos al monte del Señor,
a la casa del Dios de Jacob.
Él nos instruirá en sus caminos
y marcharemos por sus sendas;
porque de Sión saldrá la ley,
la palabra del Señor de Jerusalén».
Juzgará entre las naciones,
será árbitro de pueblos numerosos.
De las espadas forjarán arados,
de las lanzas, podaderas.
No alzará la espada pueblo contra pueblo,
no se adiestrarán para la guerra.
Casa de Jacob, venid;
caminemos a la luz del Señor.

Palabra de Dios

Salmo de hoy

Salmo 121, 1-2.4-5.6-7.8-9 R/. Vamos alegres a la casa del Señor.

¡Qué alegría cuando me dijeron:
«Vamos a la casa del Señor»!
Ya están pisando nuestros pies
tus umbrales, Jerusalén. R/.

Jerusalén está fundada
como ciudad bien compacta.
Allá suben las tribus,
las tribus del Señor.
R/.

Según la costumbre de Israel,
a celebrar el nombre del Señor;
en ella están los tribunales de justicia,
en el palacio de David.
R/.

Desead la paz a Jerusalén:
«Vivan seguros los que te aman,
haya paz dentro de tus muros,
seguridad en tus palacios».
R/.

Por mis hermanos y compañeros,
voy a decir: «La paz contigo».
Por la casa del Señor, nuestro Dios,
te deseo todo bien.
R/.

Evangelio del día

Lectura del santo evangelio según san Mateo 8, 5-11

En aquel tiempo, al entrar Jesús en Cafarnaún, un centurión se le acercó rogándole:
«Señor, tengo en casa un criado que está en cama paralítico y sufre mucho».

Le contestó:
«Voy yo a curarlo».

Pero el centurión le replicó:
«Señor, no soy digno de que entres bajo mi techo. Basta que lo digas de palabra, y mi criado quedará sano. Porque yo también vivo bajo disciplina y tengo soldados a mis órdenes; y le digo a uno: "Ve", y va; al otro: "Ven", y viene; a mi criado: "Haz esto", y lo hace».

Al oírlo, Jesús quedó admirado y dijo a los que le seguían:
«En verdad os digo que en Israel no he encontrado en nadie tanta fe. Os digo que vendrán muchos de oriente y occidente y se sentarán con Abrahán, Isaac y Jacob en el reino de los cielos».

Palabra del Señor

Espera/Esperanza - Waiting/Hoping - 1º Domingo de Adviento, Ciclo C

 


Lc 21,25-28.34-36. No hemos de vivir atrapados por el miedo o la ansiedad. El "último día" no es un día de ira y de venganza, sino de liberación. Hemos de reavivar nuestra confianza, levantar el ánimo y despertar la esperanza. Un día los poderes financieros se hundirán. La insensatez de los poderosos se acabará. Las víctimas de tantas guerras, crímenes y genocidios conocerán la vida. Nuestros esfuerzos por un mundo más humano no se perderán para siempre. Jesús se esfuerza por sacudir las conciencias de sus seguidores. "Tened cuidado: que no se os embote la mente". Mantened viva la indignación. "Estad siempre despiertos".
Editorial Verbo Divino

Música: En todo | Jesuitas Acústico

 


EN TODO Letra © P. Benjamín González Buelta, SJ
Intérpretes: P. Cristóbal Fones, SJ (Chile), P. Jorge Ochoa, SJ (México), P. David Pantaleón, SJ (República Dominicana), P. Enric Puiggròs, SJ (España) Músicos: Leticia Suárez (Violonchelo), Jorge Saenz (Bajo eléctrico), Carlos "El Chiqui" Navarro (Percusión General), P. David Pantaleón SJ (Guitarra), P. Jorge Ochoa SJ (Jarana), Daylen Rodríguez (Voz femenina)

Primer Domingo de Adviento: Primer paso la oración, no agobiar el corazón


El recién nombrado predicador de la Casa Pontificia reflexiona sobre el primer domingo del tiempo que prepara la Navidad: la realidad que vivimos es aterradora, pero Jesús que viene nos recuerda que levantemos la cabeza porque «vuestra liberación está cerca».

El tiempo de Adviento es un tiempo en el que renovamos nuestra espera del Señor que ya ha entrado en la historia, pero que volverá para llevarla a término. Es un tiempo breve pero intenso, en el que despertar, como decimos en estos días, no significa no hacer nada, dormirse, acostarse en algún sitio, sino, al contrario, volver a despertar toda nuestra lucidez y asombro ante la realidad, y ante lo que Dios, en realidad, realiza. Aunque la realidad, como nos recuerda el Evangelio, nos asuste a menudo: signos terribles, angustias, miedos, guerras, terremotos, cataclismos... El Evangelio dice incluso que todos morimos de miedo ante la realidad, y esto es verdad por muchas razones. Sin embargo, en esos momentos, Jesús dice: «Levantad la cabeza y daos cuenta de que vengo y vuestra liberación está cerca». Sería bueno tener esta capacidad. ¿Cómo hacerlo? Jesús da dos indicaciones básicas. La primera es: no agobiéis vuestros corazones. En nuestro corazón hay deseos equivocados, cosas que nos hacen vivir con un ritmo agobiado porque vamos buscando en la realidad algo que no está ahí. Por eso, no agobiar el corazón significa encontrar la profundidad adecuada de nuestros deseos, comprender lo que realmente deseamos y lo que la realidad puede ofrecernos. Y luego Jesús dice: «Velad orando». No basta con rezar, primero hay que abrir bien los ojos, vigilar. Esta es una indicación muy importante, porque muchas veces decimos oraciones pero no nos pasa nada, porque todavía tenemos los ojos cerrados, es decir, no tenemos una mirada de confianza y de atención sobre la realidad. Y, en cambio, el tiempo de Adviento comienza exactamente así: abriendo los ojos, entrando en nuestro corazón, empezando a rezar.

Fray Roberto Pasolini
Predicador de la Casa Pontificia
 

Una mirada al evangelio de la mano de María

 


El sábado 30 de noviembre Irene Pozo entrevistaba a José María Rodríguez Olaizola para hablar de "María en contemplaciones de papel", una mirada al evangelio de la mano de María

José María Rodríguez Olaizolo sj

Ángelus 01 de diciembre de 2024 Papa Francisco

 


En el Ángelus, Francisco insta a afrontar las dificultades, las angustias y las
 falsas convicciones «levantando la cabeza» , confiando en el amor de Jesús
que nos quiere salvar y que se hace cercano en cada situación de nuestra
existencia y nos ayuda a reencontrar la esperanza.

Vatican News

Las angustias, los miedos y las ansiedades por la vida personal o por lo
 que ocurre en el mundo de hoy pesan «como piedras» y llevan al desánimo;
las preocupaciones «agobian el corazón» y llevan a encerrarse en uno
mismo. Pero haciendo espacio a Jesús es posible «redescubrir la esperanza», especialmente en el tiempo que nos prepara a la Navidad. Con este mensaje
se dirigió el Papa Francisco a los fieles y peregrinos reunidos en la Plaza de
 San Pedro esta mañana, 1 de diciembre, para el Ángelus del primer domingo
 de Adviento.

Siempre hay una palabra de esperanza

Comentando el Evangelio de hoy, un relato dominado por trastornos
cósmicos y angustia, el Papa subraya cómo ni siquiera en este contexto
falta «una palabra de esperanza» de Jesús para sus discípulos: «Levántense
y alcen la cabeza, porque se acerca su liberación», dice.

La preocupación del Maestro es que sus corazones no se agobien y que
esperen con vigilancia la venida del Hijo del hombre. La invitación de Jesús
es ésta: levantar la cabeza y mantener el corazón ligero y despierto.

Mirar al cielo para comprender las cosas de la tierra

De hecho, prosigue Francisco, muchos de los contemporáneos de Jesús,
ante los «acontecimientos catastróficos que ven suceder a su alrededor -persecuciones, conflictos, catástrofes naturales- se sienten embargados por
la angustia y piensan que se acerca el fin del mundo» y «sus corazones están agobiados por el miedo».

Jesús, sin embargo, pretende «liberarlos de las angustias actuales y de
las falsas convicciones», indicándoles cómo estar «despiertos en el corazón»,
cómo leer los acontecimientos a partir del plan de Dios, que «obra la
salvación» incluso dentro de «los acontecimientos más dramáticos de la
historia». Por eso, explica, les sugiere «dirigirla mirada al Cielo para
comprender las cosas de la tierra».

El amor de Dios que salva en todo momento

De ahí la invitación del Pontífice a hacer nuestra la recomendación de Jesús,
para que «no se agobien los corazones»:

Todos nosotros, en tantos momentos de la vida, nos preguntamos: cómo
hacer para tener un corazón “ligero”, despierto y libre. Un corazón que no
se deja aplastar por la tristeza.

Aligerar el corazón

Francisco recuerda que Jesús nos invita “a confiar en su amor que nos
quiere salvar y que se hace cercano en cada situación de nuestra existencia,
 a hacerle espacio para volver a encontrar la esperanza” y añade:

Preguntémonos, pues: ¿está mi corazón agobiado por el miedo, las
preocupaciones, las angustias por el futuro? ¿Sé mirar los acontecimientos cotidianos y las vicisitudes de la historia con los ojos de Dios, en la oración,
con un horizonte más amplio? ¿O me dejo vencer por el abatimiento?

Que este tiempo de Adviento sea una ocasión preciosa para levantar la
mirada hacia Él, que aligera el corazón y nos sostiene en el camino.
Vaticans News


Cuenta atrás para la reapertura de la catedral Notre Dame

 


La catedral de Notre-Dame de París se prepara para su esperada reapertura cinco años después del devastador incendio de 2019. El 7 de diciembre, el presidente Emmanuel Macron, asistirá a la misa de reapertura. Durante este evento, la catedral será considerada oficialmente abierta al público.

Durante estos 5 años de restauración, la Catedral ha ido poco a poco en mejoría. Este es el momento en el que se vuelve a colocar la aguja central, ya restaurada, en lo alto con un gallo de oro que lleva en su interior un papel con todos los nombres de las personas que han colaborado en su arreglo.

A partir de su inauguración, durante la primera semana de apertura, Notre Dame abrirá sus puertas hasta las 10 de la noche permitiendo a los visitantes admirar la restauración.

No será hasta el 16 de diciembre cuando se retome su actividad habitual. Según han podido informar las autoridades, se espera que 15 millones de personas visiten cada año este monumento parisino.

Con la reapertura de Notre-Dame, París recupera uno de sus mayores símbolos culturales y religiosos.

BAM

Rome Reports