Registro, estado de San Pablo, Brasil (Patricio Downes / Religión Digital).- El obispo Gílio Felício, responsable de la Sección Afroamericanos del CELAM, celebró la misa inaugural de la 21ª Assembléia dos Padres, Bispos e Diáconos Negros, que sesiona en esta ciudad paulista, según informó la Conferencia Episcopal Brasileña.
Días antes del encuentro, monseñor Felício, quien es obispo de Bagé, dijo a Mutirao de Comunicación que la comunicación debe favorecer un diálogo provechoso entre las culturas, y su participación en la construcción de una sociedad equilibrada, fecunda, al servicio de la vida humana y del planeta Tierra, cuyo horizonte, anunciado por Jesucristo, es la civilización del amor.
Gílio anticipó que el tema será analizado será analizado, del 3 al 7 de agosto próximo, en Panamá, durante el encuentro de líderes afro-americanos. Ahora, en la catedral San Francisco Javier, de Registro, el obispo de Bagé, lanzó la primera flecha de un debate entre el clero de origen afroamericano y toda la sociedad, incluidos los católicos, de la sociedad "quilombola" o de descendientes de esclavos, que vivían recluidos en "quilombos".
El debate continuará hasta este viernes, y ya el lunes por la mañana, la procuradora de la fundación Palmares, Dora Lucia, reflexionó sobre el tema "Negros y legalidad en la historia de Brasil". Recordó que las leyes brasileñas redactadas desde la época del Brasil Império fueron perjudiciales para la población negra.
"La ley que prohibía el tráfico negrero, la ley sexagenaria del libre vientre, a pesar de su aparente aspecto beneficioso para los negros, trazaban en sus artículos algunas condicines que se revelaron perjudiciales para la población negra. Normalmente tenemos una lectura superficial de estas leyes y no nos damos cuenta de su aspecto pernicioso para la población negra de la época", afirmó Dora.
Recordó que para la población de esclavos y sus descendientes, las cuestiones legales aun eran desconocidas, aunque había pasado un siglo de historia para los territorios de esclavitud. "Este desconocimiento permitió que los negros quilombolas sufriesen todo tipo de violencia en términos existenciales y culturales".
Los obispos negros, que en Brasil son 15 junto a monseñor Felício, además de los sacerdotes y diáconos afroamericanos decidieron apoyar la demarcación y titularidad de las tierras "quilombolas", donde tantos africanos esclavos sufrieron tortura y muerte, incluidos sus descendientes.
En este aspecto, la asamblea se propuso trabajar junto a funcionarios del Instituto Nacional de Colonización y Reforma Agraria (Incra) y la Fundación Palmares. Luego de la exposición de la doctora Dora Lucia siguió un debate de los participantes acerca de cómo apoyar la lucha de las poblaciones "quilombolas".
También se produjo un debate con los representantes del Centro de Apoyo a las Poblaciones Marginalizadas (CEAP), de Rio de Janeiro, sobre la sobre o combate a intolerância religiosa. Os padres e bispos foram convidados a participar da segunda caminhada em defesa da liberdade religiosa marcada para o dia 20 de setembro de 2009, na cidade do Rio de Janeiro.
Hoy se realizó un día de retiro, coordinado por el obispo de Guarapuava (PR), dom Antônio Wagner da Silva. Y este jueves, los diáconos, sacerdotes y obispos visitarán el Quilombo de Ivaporunduva, en la ciudad de Registro, donde escucharán los problemas que les planteen los vecinos descendientes de esclavos, luego de celebrar la misa.
El encuentro finalizará el viernes, tras la elección y toma de posesión de la nueva comisión directiva del Instituto Mariama, que actúa como articulación de los obispos, padres y diáconos negros.
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