Con la Pascua ya bien avanzada aparece en la singladura litúrgica de la Iglesia la fiesta del Buen Pastor. Es el Evangelio de Juan quien contiene esas palabras maravillosas de Jesús en que, Él mismo, se declara el Buen Pastor que guía y conduce a sus ovejas a lugares bellos donde descansar, comer y aprender. Y esta idea del Buen Pastor y del único rebaño nos lleva a meditar también por la unidad de todos los cristianos en torno a la mano protectora de Jesús de Nazaret.Betania
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