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Sábado, 2 de mayo 2009
Según informa la agencia italiana ANSA, la revista Civilta Cattolica, que se imprime con el visto bueno del Vaticano, defiende al papa Benedicto XVI y a la “doctrina de la Iglesia” frente a la que llamó “hostilidad a priori” italiana y europea . El último número del quincenario de los jesuitas italianos escribe que en Italia y en Europa existe una “hostilidad a priori contra la doctrina de la Iglesia y contra el Papa que la representa”.
La revista, tras afirmar que se trata de un prejuicio inmaduro, algo así como un caso de “psicología de la adolescencia”, sostuvo que “se ejercen constantemente la hipercrítica, el hastío, el malestar ante el magisterio y la persona del Papa” y que, en el mismo mundo católico, “serpentea, en términos mas respetuosos, un cierto disentimiento”.
Benedicto XVI es, según Civilta Cattolica, “un hombre de gran gentileza, de profunda intensidad espiritual, de gran curiosidad intelectual y, sobre todo, de serena tranquilidad interior”.
De todos modos -agrega el quincenario- es un papa “incómodo” para los laicistas, que, aun atenuando su juicio sobre opciones “compartibles en el plano práctico”, no consiguen comprender y aceptar su magisterio sobre temas éticos y sobre bienes “no negociables”.
La revista cita, por el contrario, algunos nombres de pensadores que apoyan al Papa, como los historiadores Michael Burleigh y Paul Johnson o el filósofo francés André Glucksmann. Todos ellos, eegún la revista de los jesuitas, unidos por la constatación de que "el proyecto del neoiluminismo laicista está exhausto" y por "el convencimiento de que no puede existir un conflicto fundado entre religión y ciencia, entre la actividad de la razón y la apertura a la trascendencia". Quizás por eso, estos pensadores no ven en el Papa Ratzinger a un personaje polémico, sino al abanderado de un nuevo humanismo, que se opone a la cosificación del hombre, a la cultura de la imagen y al consumismo como un fin en sí mismo.
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