Monday, September 28, 2009

Pueblo de Concepción celebró con fervor Día de Oración por Chile


“¡Que bueno y que hermoso! que tantos hijos de esta ciudad de Concepción hayan querido venerar hoy a la Virgen bajo el título de Nuestra Señora del Carmen, reina y madre de Chile, para pedirle que interceda por esta Patria nuestra”. Con estas palabras inició Monseñor Ricardo Ezzati A., sdb, Arzobispo de Concepción, su homilía en la catedral de la ciudad, el Día de Oración Por Chile.


La procesión de la Virgen del Carmen salió desde el templo de San Agustín, en un día hermoso, con la presencia de gran cantidad de fieles. En la partida, un contingente bajo los acordes de la Banda de la II Zona Naval, rindió honores a la Virgen, cuya imagen fue hermosamente adornada en un carro, que fue tirado por miembros de la Cofradía del Carmen.
La procesión fue presidida por Monseñor Ezzati, acompañado de sacerdotes, diáconos, seminaristas y numerosos fieles. A su llegada a la catedral, la Virgen fue recibida con campanadas y pañuelos blancos de otros tantos fieles que esperaron en el templo.
Monseñor apreció la presencia de niños y niñas muy pequeños, algunos en brazos de sus papás y otros en los primeros años de educación; apreció la participación también de jóvenes, adultos y ancianos, hombres y mujeres y miembros de las FF. AA y de Carabineros; de seminaristas, diáconos y sacerdotes. “Todos nos sentimos hijos de María y todos queremos presentarle las intenciones más íntimas de nuestro caminar como pueblo de Dios, especialmente en este territorio de Concepción”, precisó.



Agregó que “si María que estuviera ausente en nuestra vida ciudadana, significaría también para nosotros una orfandad, un desamparo que nadie quiere. Por eso, queremos decirle a María, como expresión del pueblo de Concepción, que la queremos como nuestra madre y nuestra reina”.
Pidió a la Virgen que, en vísperas de las elecciones presidenciales, se imponga un clima de fraternidad y de amistad entre las candidaturas y además, abogó por una solución del conflicto de los trabajadores forestales de la provincia de Arauco. “Queremos pedirle a los trabajadores, a los empresarios y al Estado, que tiene el deber de colaborar en la solución de los problemas, para que la Virgen María les conceda a todos la sabiduría, el dialogo, la comprensión y el bien común”.
Pidió oración para que la Virgen ayude a los desempleados, a los jóvenes y niños que buscan una educación de calidad y especialmente, que ninguno sea víctima de la droga, de la violencia, del alcoholismo y de la marginación. Pidió por nuevas vocaciones sacerdotales y finalmente, invitó a todos los presentes a que, en silencio, presentara sus propias necesidades, haciendo una oración mirando la imagen de la Virgen. Al concluir la celebración eucarística, entregó un presente a los representantes del Ejército, Armada y Carabineros, gesto que fue sellado con un fuerte aplauso por los fieles. Después, la procesión retomó su camino hacia la parroquia San Agustín, para cerrar el programa.


Fuente: Comunicaciones Concepción

Concepción, 28/09/2009

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