El episodio de Zaqueo –el recaudador de impuestos—es uno de los más bellos que nos narran los Evangelios. Aquel personaje acude por curiosidad a conocer al Rabí de Galilea, ya muy famoso. En un momento, dado su mirada se cruza con la del Maestro. Y ya queda todo dicho. Una mirada de Jesús es un camino infalible e indeleble para la conversión. Tal vez, es bueno que todos, en estos días, recordemos aquel momento especial de nuestras vidas en el que nos sentimos mirados por Jesús de Nazaret. Y este es el contenido principal de este Domingo 31 del Tiempo Ordinario que leemos hoy.
Betania
No comments:
Post a Comment