Cerca de 5 mil personas recorrieron las calles de Maipú, el pasado sábado 30 de septiembre, dando así testimonio de la importancia que tiene la familia en sus vidas y en la sociedad chilena. Padres, hijos y abuelos, en un ambiente de fiesta, caminaron por dos horas pidiendo respeto y apoyo para la familia, la cual, señalaron, es la base de una sociedad sana y cuna de personas íntegras y felices.
La IV Caminata por la Familia, realizada bajo el lema “Dios es amor, Dios es familia”, partió desde el cerro Primo Rivera, realizando un recorrido por las principales calles del centro de Maipú, lo cual no dejó indiferentes a muchos transeúntes que adhirieron con aplausos y con saludos al entusiasta grupo que nunca dejó de cantar y rezar
La muchedumbre fue encabezada por decenas de acólitos y acólitas, por sacerdotes de la congregación Sagrada Familia de Nazareth y por el Vicario de la Familia, padre Marcos Burzawa, quienes durante todo el camino fueron motivando la oración y acompañando a los fieles.
La actividad culminó con una Eucaristía en el Santuario Nacional de Maipú la que fue presidida por el obispo auxiliar de Santiago, monseñor Andrés Arteaga, quien destacó que la familia, a pesar de los problemas es una buena noticia para la humanidad. “Todos hemos nacido en una familia, la vida la hemos recibido de una familia y la calidad de vida depende de la familia. La misión que tenemos es tratar de ayudar a la familia para que cumpla su misión”, añadió.
Monseñor Arteaga llamó a los católicos a unirse en torno a la familia y a “trabajar con mucha pasión para que todas las familias de Chile puedan tener calidad de vida”.
Fuente: Iglesia.cl
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