"Se ponen a sí mismos publicamente en situación objetiva de pecado"
Los obispos negarán la "sagrada comunión" a los políticos que apoyen la ley del aborto
Los políticos católicos que voten a favor de la Ley del Aborto "no podrán recibir la comunión" hasta que "se confiesen y reparen públicamente el mal causado", según acordaron ayer los obispos españoles, reunidos en Asamblea Plenaria. En rueda de prensa posterior, el portavoz episcopal, Juan Antonio Martínez Camino, fue más allá, y aclaró que, para que puedan volver a tomar la comunión, dichos políticos "tendrán que decir públicamente que se arrepienten de lo dicho y de lo que hubieran votado".
"No están excomulgados, están en situación objetiva de pecado", aclaró Camino, quien incidió en que ésta postura "no es nueva, existe desde siempre". Sin embargo, y a preguntas de RD, no quiso aclarar si la norma tendría un carácter retroactivo, es decir, si afecta a aquellos que votaron la norma en 1985. Y, más aún, tampoco aclaró si se va a exigir a los sacerdotes que, llegados a una hipotética situación de negar la comunión pública a un político que haya votado a favor de la ley del Aborto, lleven a la práctica esta doctrina. Tampoco, si se sancionará a aquellos presbíteros u obispos en el caso de que, como hasta la fecha en España, dicha negación de la comunión no se produce. "Los sacerdotes saben lo que tienen que hacer", acertó a decir.
Éste es el texto aprobado por la Plenaria:
La Asamblea concluye cuando el Congreso de los Diputados ha comenzado el debate sobre el Proyecto de Ley Orgánica de salud sexual y reproductiva y de la interrupción voluntaria del embarazo. Ante un asunto de tanta trascendencia para la sociedad española, los obispos quieren hacer las siguientes consideraciones:
1. La Asamblea Plenaria hace expresamente suya la Declaración del pasado 17 de junio de la Comisión permanente titulada Sobre el anteproyecto de ley del aborto: atentar contra la vida de los que van a nacer convertido en "derecho". Los obispos recomiendan encarecidamente su lectura.
2. Según decía la Declaración de la Comisión Permanente, este Proyecto de Ley "constituye un serio retroceso respecto de la actual legislación despenalizadora, ya de por sí injusta". Nadie que atienda a los imperativos de la recta razón puede aprobar ni dar su voto a este proyecto de ley.
En particular, los católicos deben recordar que si lo hacen, se ponen a sí mismos públicamente en una situación objetiva de pecado y, mientras dure esta situación, no podrán ser admitidos a la Sagrada Comunión (Cf. Carta del Prefecto de la Congregación para la Doctrina de la Fe, de junio de 2004, al Presidente de la Conferencia Episcopal de los Estados Unidos de América).
3. Los católicos estamos por el "sí" a la vida de los seres humanos inocentes e indefensos que tienen derecho a nacer; por el "sí" a una adecuada educación afectivo-sexual que capacite para el amor verdadero; por el "sí" a la mujer gestante, que ha de ser eficazmente apoyada en su derecho a la maternidad; por el "sí" a leyes justas que favorezcan el bien común y no confundan la injusticia con el derecho.
Los obispos invitan a proseguir sin descanso el trabajo a favor de estas nobles metas y exhortan a no desfallecer en la plegaria, especialmente durante este año dedicado a la oración por la vida.
RD
No comments:
Post a Comment