Tengo una ventana por lo que aprovecho de saludar a todos los que ingresan a este blog Peregrinos.
Saliendo de una reunión, he caminado por la calle Providencia, llena de gente, y la temperatura ya es alta.
Está para tomar helado (sin azucar y pocos CHO, por supuesto).
Ya mi madre volvió a Punta Arenas y el sábado nos despedimos almorzando en el Giratorio (por supuesto que saqué fotos y ya las pondré) ¿Saben cuánto se demora en dar la vuelta completa?.
Lo pasamos muy bien y ayer domingo partió a la tierra donde la esperaba la Pelu. Viajó con otra de sus nietas, Lidia.
Estoy trabajando a full time para salir la próxima semana de vacaciones y tomarlo todo con más calma.
A propósito de tomárselo con calma, voy a pasar de inmediato a contarles una historia para alegrar el alma.
CUANDO EL ZAPATO SE ADAPTA
Ch'ui, el diseñador
era capaz de trazar círculos más perfectos
a mano alzada
que con un compás.
Sus dedos hacían brotar
formas espontáneas de la nada. Su mente
estaba, mientras tanto, libre y sin preocupaciones
acerca de lo que estaba haciendo.
No era necesario aplicarse, pero
su mente era perfectamente simple
y desconocía obstáculo alguno
Al igual que, cuando el zapato se adapta,
se olvida el pie;
cuando el cinturón se adapta,
se olvida el estómago;
cuando el corazón está bien,
el pro y el contra se olvidan.
Sin inclinaciones, sin compulsiones,
sin necesidades, sin atracciones;
entonces los asuntos de uno
están bajo su control
y uno se convierte en un hombre libre.
Tomárselo todo con calma es correcto. Empieza
correctamente
y estarás en calma.
Continúa con calma y estarás en lo correcto.
La manera correcta de tomárselo todo con calma
es olvidarse del camino correcto
y olvidarse de que seguirlo es fácil
Thomas Merton
Que tengan una buena tarde y seguimos en contacto.
Un abrazo
Roberto
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