Serían los últimos del grupo de los 75
Recuerda que la Iglesia ha tenido una "participación pública" en Cuba
El cardenal cubano Jaime Ortega afirmó hoy que tiene la "certeza moral" de que los once presos del Grupo de los 75 que aún permanecen en la cárcel serán liberados en los próximos meses, e indicó que también continuarán las excarcelaciones de otros reclusos por motivos políticos.
"Existe la promesa clara y formal del Gobierno cubano de que todos esos prisioneros serán puestos en libertad", reiteró Ortega durante una misa realizada este sábado en la Catedral de La Habana, con motivo de la Jornada Mundial de la Paz.
El Arzobispo de La Habana insistió en que la liberación de ese grupo de presos políticos es "un compromiso personal" que tiene "ante la opinión pública nacional e internacional".
Asimismo, recordó que entre los once que siguen en la cárcel del "G-75" algunos desean viajar a Estados Unidos y otros quieren permanecer en Cuba.
"Tengo además la certeza moral de que en los próximos meses serán puestos en libertad tanto esos prisioneros, como otros de un grupo mayor de reclusos sancionados por algún tipo de hecho relacionado con posturas o acciones políticas", añadió.
Durante su homilía, Ortega repasó el papel de la Iglesia católica cubana en 2010 para subrayar lo novedosa y positiva que resultó la respuesta del Gobierno a su "gestión humanitaria" en el caso de los presos, así como su consecuente mediación en el proceso de liberaciones.
En ese sentido, precisó que la Iglesia ha tenido una "participación pública" que no había tenido "en muchos años", lo cual interpretó como un modo de "afianzar" el proceso de ampliación de las libertades religiosas que se ha vivido "progresivamente en los últimos años" en la isla.
Tras iniciar un inédito diálogo con la Iglesia, y con el apoyo del Ejecutivo español, el Gobierno que preside Raúl Castro anunció en julio pasado que se pondría en libertad a los 52 opositores del llamado Grupo de los 75 que quedaban en prisión, de los cuales 40 han sido ya excarcelados con la condición de viajar a Madrid.
Arnaldo Ramos Lauzurique es el único miembro del grupo que salió de prisión en noviembre pasado con una "licencia extra penal por razones humanitarias" y ha permanecido en Cuba.
Los once presos del "G-75" condenados en la oleada represiva de la "Primavera Negra" de 2003 que quedan en prisión se niegan a viajar a España y demandan ser liberados sin una licencia extra penal.
En octubre el Gobierno extendió su oferta a otros presos y ya suman 16 los que no forman parte del Grupo de los 75 (considerados prisioneros de conciencia por Amnistía Internacional) que han aceptado viajar a España tras salir de la cárcel.
Por otra parte, el cardenal también se refirió al proceso de reformas económicas emprendido por el Gobierno de Raúl Castro para "actualizar" el socialismo en la isla, y dedicó una oración a "su buena marcha" para el bien del pueblo cubano.
Destacó que los cambios económicos que se proyectan en Cuba a partir de este año implican a "todos" y su buena marcha no depende solamente de las autoridades.
Al respecto, enfatizó en la importancia de que los cubanos comprendan las nuevas medidas y expresen claramente sus divergencias o señalen lo que deba ser modificado.
"Esa es una de las más importantes responsabilidades que los gobernados deben asumir ante Dios", agregó.
(Rd/Efe)
"Existe la promesa clara y formal del Gobierno cubano de que todos esos prisioneros serán puestos en libertad", reiteró Ortega durante una misa realizada este sábado en la Catedral de La Habana, con motivo de la Jornada Mundial de la Paz.
El Arzobispo de La Habana insistió en que la liberación de ese grupo de presos políticos es "un compromiso personal" que tiene "ante la opinión pública nacional e internacional".
Asimismo, recordó que entre los once que siguen en la cárcel del "G-75" algunos desean viajar a Estados Unidos y otros quieren permanecer en Cuba.
"Tengo además la certeza moral de que en los próximos meses serán puestos en libertad tanto esos prisioneros, como otros de un grupo mayor de reclusos sancionados por algún tipo de hecho relacionado con posturas o acciones políticas", añadió.
Durante su homilía, Ortega repasó el papel de la Iglesia católica cubana en 2010 para subrayar lo novedosa y positiva que resultó la respuesta del Gobierno a su "gestión humanitaria" en el caso de los presos, así como su consecuente mediación en el proceso de liberaciones.
En ese sentido, precisó que la Iglesia ha tenido una "participación pública" que no había tenido "en muchos años", lo cual interpretó como un modo de "afianzar" el proceso de ampliación de las libertades religiosas que se ha vivido "progresivamente en los últimos años" en la isla.
Tras iniciar un inédito diálogo con la Iglesia, y con el apoyo del Ejecutivo español, el Gobierno que preside Raúl Castro anunció en julio pasado que se pondría en libertad a los 52 opositores del llamado Grupo de los 75 que quedaban en prisión, de los cuales 40 han sido ya excarcelados con la condición de viajar a Madrid.
Arnaldo Ramos Lauzurique es el único miembro del grupo que salió de prisión en noviembre pasado con una "licencia extra penal por razones humanitarias" y ha permanecido en Cuba.
Los once presos del "G-75" condenados en la oleada represiva de la "Primavera Negra" de 2003 que quedan en prisión se niegan a viajar a España y demandan ser liberados sin una licencia extra penal.
En octubre el Gobierno extendió su oferta a otros presos y ya suman 16 los que no forman parte del Grupo de los 75 (considerados prisioneros de conciencia por Amnistía Internacional) que han aceptado viajar a España tras salir de la cárcel.
Por otra parte, el cardenal también se refirió al proceso de reformas económicas emprendido por el Gobierno de Raúl Castro para "actualizar" el socialismo en la isla, y dedicó una oración a "su buena marcha" para el bien del pueblo cubano.
Destacó que los cambios económicos que se proyectan en Cuba a partir de este año implican a "todos" y su buena marcha no depende solamente de las autoridades.
Al respecto, enfatizó en la importancia de que los cubanos comprendan las nuevas medidas y expresen claramente sus divergencias o señalen lo que deba ser modificado.
"Esa es una de las más importantes responsabilidades que los gobernados deben asumir ante Dios", agregó.
(Rd/Efe)
1 comment:
leggere l'intero blog, pretty good
Post a Comment