La actriz sevillana Paz Vega, que presentó hoy en Sevilla su última película "Teresa. El cuerpo de Cristo", sobre Santa Teresa de Jesús y dirigida por Ray Loriga, aseguró que se trata del personaje "al que más le he puesto, interior y exteriormente".En conferencia de prensa posterior al pase de prensa de la película, que se exhibirá al público a partir del próximo día 9, la actriz dijo que "cuando llega un personaje de este calibre, es una suerte y un riesgo, y no todo brilla y se tiene mucho miedo".
Paz Vega dijo que para afrontar esta interpretación tuvo "un proceso de investigación muy rico" y que hasta el momento de que le ofrecieran el papel su contacto con la Santa había sido la lectura de sus poemas y el propio de una alumna en el colegio religioso de Santa Ana, en Sevilla, donde cursó estudios, eso fue "lo único que sabía de ella" hasta ese momento.
"Fue una mujer de una dimensión increíble, una gran mujer, una gran escritora y una luchadora", definió la actriz a San Teresa.
Recordó que el rodaje de la película fue muy difícil: "Nunca me había visto tan encorsetada en un traje, casi sin maquillaje y no tenía dónde agarrarme en algunas escenas que se rodaban de un tirón", además de que el rodaje se efectuó en escenarios muy fríos y en invierno.
Paz Vega, que está en los meses finales de su embarazo, dijo que ella es una mujer muy expresiva y que gesticula mucho, y que esas armas no le han valido para Santa Teresa, de la que dijo que su trabajo no se ha tratado tanto "de entenderla" como de "darle verdad".
A la pregunta de si ella se había engolfado con el personaje, como Santa Teresa decía estarlo con Dios, la actriz respondió que la Santa es uno de esos personajes que "te enamoran y te cautivan" y este "especialmente me ha cautivado y lo he disfrutado mucho".
Ray Loriga explicó que el periodo histórico que abarca el filme es el del libro de Santa Teresa "Libro de la vida", desde su juventud hasta la fundación de su primer convento, y calificó al personaje de "mujer de talento y coraje", por lo que dijo asumir la "acusación" de que se trata de una película feminista, al considerar que la lucha feminista "está muy lejos de acabarse".
Para el director, gran parte del misterio del personaje está en la conjunción de una vida interior tan rica y, a la vez, una desmesurada actividad social, como si fuese "una empresaria de su causa", a la vez que ésta le supone sacrificio y humildad y, a la vez, arrogancia.
Loriga calificó de "ridículo" haber sido más tímidos en el siglo XXI que en el XVI a la hora de abordar al personaje, cosa que dijo haber hecho "desde el rigor artístico y desde el respeto, no a la Conferencia Episcopal sino a la propia Teresa".
A la pregunta de si la película agradará a la Conferencia Episcopal, el director dijo desconocer la frecuencia con la que los obispos van al cine, y añadió que "desde la perspectiva dogmática y católica practicante tendrán sus recelos y sus opiniones, tan respetables como la mía".
También dijo que, "como herencia, Teresa pertenece al mundo y no a la Conferencia Episcopal" y que el personaje se podía haber abordado "desde un millón de perspectivas distintas", ya que también existen teorías neurológicas para explicar al personaje y sus éxtasis, si bien Loriga matizó que "Teresa es mucho más que los éxtasis" porque acometió "una revolución social y política dentro de la Iglesia, fue una luchadora, una heroína y un icono del feminismo cuando esa palabra no existía".
Fuente: El Periodista Digital
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