ROSEMARY GOLDIE, UNA DE LAS “MADRES DEL CONCILIO”
Del 4 al 6 de octubre, en el Pontificio Ateneo Sant’Anselmo de Roma, se llevará a cabo una encuentro sobre la participación femenina en el Vaticano II
FABRIZIO MASTROFINIROMA
Lo femenino en la teología tuvo un nuevo inicio con el Vaticano II. Así, a 50 años del evento conciliar, llega el congreso internacional “Teólogas releen el Vaticano II. Asumir una historia, preparar el futuro”. El congreso se llevará a cabo en Roma del 4 al 6 de octubre en el Pontificio Ateneo S. Anselmo, sede de la Conferencia benedictina. El congreso fue presentado hoy en Roma durante una concurrida conferencia de prensa. Marinella Perroni, profesora de teología y presidenta del la “Coordinación de Teólogas Italianas” (www.teologhe.org), subrayó que a partir del Concilio se abrieron las puertas para una presencia femenina consciente en la Iglesia.
«Desde entonces se ha hecho mucho, pero todavía hay muchísimo que hacer para que haya una verdadera participación consciente y aceptada de las mujeres». El congreso teológico internacional contará con la presencia de historiadores y teólogos de todo el mundo (como Hervé Legrand y Gerald Mannion, Maureen Sullivan y Massimo Faggioli, Tina Beattie y Mercedes Navarro Puerto, además de Stella Morra, Cettina Militello, Serena Noceti y Cristina Simonelli).
El congreso, añadió Perroni, pretende ser «un momento de intercambio ecuménico entre estudiosas y estudiosos comprometidos en los diferentes ámbitos del saber teológico y de la vida eclesial. El objetivo es el de rendir cuentas sobre estos primeros cincuenta años en los que la Iglesia católica ha sabido reconocer en la diferencia de género un aporte de inteligencia y una reserva de entusiasmo».
Durante la conferencia de prensa también se presentaron algunas publicaciones que la Coordinación de Teólogas Italianas llevó a cabo por los 50 Años del Concilio: con la colaboración de la Fundación para las Ciencias Religiosas de Boloña, Tantum aurora est. Donne e concilio Vaticano II (Tantum aurora est. Mujeres y Concilio Vaticano II), volumen sobre el papel de las mujeres en el Concilio, y, un texto de carácter divulgativo que llevó a cabo Adriana Valerio, Madri del Concilio: 23 donne al Vaticano II (Madres del Concilio: 23 mujeres en el Vaticano II).
Durante el Concilio estuvieron como invitadas 23 mujeres: 10 religiosas y 13 laicas, de las cuales 9 eran núbiles, 3 viudas y una estaba casada todavía. No hablaron durante las asambleas, ni siquiera para agradecer haber sido invitadas, pero su aporte fue determinante para el capítulo IV de la “Lumen gentium” sobre los laicos, para aquellas partes de la “Gaudium et spes” sobre el aporte de los creyentes a la construcción de la ciudad humana, para el decreto sobre el apostolado de los laicos..., pero incluso para muchos otros aspectos del debate conciliar.
A un gruppo di donne che si rivolsero ad una delle “madri del Concilio” per chiedere su quali argomento le donne avrebbero dovuto contribuire, la donna rispose: “Allora ci interesseremo di tutto”. La tentazione era ed è spesso quella di relegare le donne a trattare di tematiche che riguardano se stesse, tralasciando il resto.
A un grupo de mujeres que se dirigieron a una de las “madres del Concilio” para preguntar cuáles eran los temas sobre los que habrían debido contribuir, la mujer respondió: «Entonces nos interesaremos por todo». La tentación de marginar a las mujeres en la Iglesia siempre está presente, ignorando que todos los temas tienen que ver con ellas y que ellas tienen seguramente mucho que ofrecer al respecto.
Vatican Insider
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