En una carta titulada “¿Cómo entender y enfrentar el complejo escenario económico?", la Unión Social de Empresarios Cristianos aborda la actual crisis mundial desde la perspectiva cristiana.
¿Cómo entender y enfrentar el complejo escenario económico?
La crisis financiera que precede las actuales dificultades económicas, se explica entre otras causas, por las decisiones de unos pocos individuos, quienes buscando un desmedido beneficio propio y de corto plazo, atentaron contra el Bien Común. Cuando la libertad está guiada por criterios individualistas deja de ser auténtica, pues la excesiva dependencia y ambición de lo material es también un tipo de esclavitud.
Ha influido la ausencia de una recta conciencia, sumado a estímulos diseñados para obtener beneficios en el corto plazo y la falta de regulación acorde a la sofisticación de los nuevos instrumentos financieros. Todo esto es terreno fértil para situaciones como la actual. Creemos que esta crisis no es tan sólo económica, si no también ética y moral.
La superación de este complejo escenario, debiera ser resultado de un esfuerzo coordinado de todos los actores de la sociedad. Hacemos un llamado al empresariado a ajustar sus expectativas de utilidad cuando esto no ponga en riesgo la continuidad de la organización, viviendo un espíritu de austeridad y solidaridad. Instamos a todos los integrantes de la empresa a dialogar, a buscar soluciones solidarias y creativas, para que los despidos se conviertan ojalá, en la última alternativa para la sostenibilidad de la empresa. A su vez, esperamos que nuestras autoridades además de las positivas medidas de reactivación anunciadas, hagan urgentemente los ajustes necesarios para modernizar la legislación laboral y ésta se convierta en un elemento positivo en la creación y mantención del empleo.
Tanto los inicios de la crisis, como su superación, se relacionan con la caridad, esa disposición a amar al prójimo como a si mismo, como principio fundamental propuesto en el Evangelio. Ahora es el momento de incorporar en nuestros criterios de discernimiento, valores que tiendan a humanizar nuestra sociedad y organizaciones, de modo que guíen nuestro accionar y sean un “seguro” para no caer a futuro en los mismos errores.
Jorge Matetic,
presidente
Rolando Medeiros y Erwin Hahn, vicepresidente
Unión Social de Empresarios y Ejecutivos Cristianos
Fuente: USEC
Santiago, 02/03/2009
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