En una entrevista con la Radio Vaticana, el portavoz de la Iglesia católica egipcia analiza la situación política del país
REDACCIÓNROMA
«Desde la caída de Mubarak, en enero de 2011, cada quien tiene su propia idea política, con lo cual el pueblo egipcio se ha dividido en muchos grupos: liberales, socialistas, islamistas con todos los matices de la islamización. Ahora queremos que haya un verdadero espíritu de reconciliación con un gobierno de unidad nacional que nos ayude a volver a ser un solo país, como es justo que sea». Lo afirma ante los micrófonos de la Radio Vaticana el padre Griech, vocero de la Iglesia católica egipcia.
«La comunidad cristiana en Egipto está un poco preocupada por el hecho de que el nuevo presidente provenga de la parte islamista de los egipcios, de los Hermanos Musulmanes», afirma el sacerdote, aunque también expresa la esperanza de que «en la nueva era que estamos viviendo, los cristianos puedan encontrar justicia y no discriminación. Esto es lo que el nuevo presidente Morsi prometió en tantas ocasiones; incluso ayer cuando se reunió con los obispos de la Iglesia copta ortodoxa; hoy recibió a la Iglesia católica de Egipto, cuyos exponentes se dirigieron al palacio presidencial para ofrecer sus felicitaciones al nuevo presidente y para tener una entrevista». La Iglesia católica pretende indicar varias cuestiones: «Antes que nada, la justicia para todos los egipcios».
Y luego, que el nuevo presidente (tal y como prometió) ayude a los pobres, a los que no tienen casa, a los analfabetas. «Como usted sabe –dijo el padre Griech– el 40 % de la población egipcia vive por debajo del margen de la pobreza. Esto es lo que, como cristianos, pedimos para el pueblo de Egipto, tanto para los cristianos como para los musulmanes: mejorar las condiciones de vida de los ciudadanos, para que se pueda salir de la condición actual de pobreza. Este es uno de los temas principales que los obispos desean afrontar».
Vatican Insider
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