Wednesday, November 01, 2006



Mateo 5:1-6
En aquel tiempo, al ver Jesús el gentío, subió a la montaña, se sentó, y se acercaron sus discípulos; y él se puso a hablar, enseñándoles: "Dichosos los pobres en el espíritu, porque de ellos es el reino de los cielos. Dichosos los que lloran, porque ellos serán consolados. Dichosos los pacientes, porque ellos heredarán la tierra. Dichosos los que tienen hambre y sed de la justicia, porque ellos quedarán saciados."

¿Qué me estás diciendo, Señor?

Pensamientos sobre el pasaje de hoy

Pobre en el espíritu: ¿qué significa para mí, Señor? Cuando despierte y sepa que alguien ha vaciado mi cuenta del banco, ¿debo ponerme a cantar aleluyas? No parece ser necesario ir tan lejos; pero podría encogerme de hombros y pensar: "es sólo dinero".

Eso sería un progreso, un progreso contra-cultural.

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