"Jamás el oro ha sido para mí
la base de mi confianza y seguridad.
Jamás mi dicha ha consistido
en tener grandes riquezas
o en ganar mucho dinero"
(Job 31, 24-25)
Señor, tú eres mi seguridad.
Yo siento tu bondad de cada día.
Sólo deseo servir con mis acciones
y ayudar a quienes me confiaste:
los pobres, mi familia y mi Iglesia.
Amén
No comments:
Post a Comment