Mateo 18:1-5En aquel momento los discípulos se acercaron a Jesús y le preguntaron:"¿Quién es el más grande en el Reino de los Cielos?"Jesús llamó a un niñito, lo colocó en medio de los discípulos y declaró: "En verdad les digo: si no cambian, y no llegan a ser como niños, nunca entrarán en el Reino de los Cielos. El que se haga pequeño como este niño, ése será el más grande en el Reino de los Cielos. Y el que recibe en mi nombre a un niño como éste, a mí me recibe."
¿Qué me estás diciendo, Señor?
Reflexiones sobre la lectura de hoy
Jesús señala al niño más pequeño de la multitud, y nos estimula a ser como él - en esa cultura, como en muchas culturas, un niño no tenía influencia alguna, ni estatus, ni control sobre su vida. En todo era dependiente de su familia y de su comunidad. Jesús señala dos cosas: cómo debemos vivir nuestra vida, y cómo debemos aceptar a los más humildes en nuestra comunidad. Somos miembros de la familia de Jesús, de su comunidad y de su Iglesia, por virtud de quién somos, antes de lograr nada.
Quizás en oración podríamos detectar qué es lo que nos da un sentido de ser importantes, y ponerlo al lado de las fotografías de nuestros niños, quienes saben que todo lo que tienen es regalo de otros y de Dios.
De Espacio Sagrado
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