RD/Reuters).-La Iglesia Católica de Colombia clamó el viernes a la guerrilla la inmediata liberación de la ex candidata presidencial Ingrid Betancourt, gravemente enferma como consecuencia de un secuestro de más de seis años a manos de la mayor guerrilla izquierdista.La suplica se produjo horas después de que el Gobierno del presidente Alvaro Uribe propuso a las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) liberar a la ex candidata a cambio de la excarcelación masiva de rebeldes, incluso de los condenados por delitos de lesa humanidad.
Al clamor de la Iglesia Católica se unieron familiares de Betancourt y políticos recientemente liberados que le pidieron a la ex candidata presidencial no desfallecer y resistir hasta conseguir la libertad para que se pueda reunir con sus hijos.
"No sabemos ni siquiera a quien hay que recurrir como cabeza de las FARC, pero yo creo que un llamado general a todos ellos (...) para que acojan ese llamado y pueda salvarse la vida de Ingrid Betancourt y de todos los demás que están secuestrados," dijo el presidente de la Conferencia Episcopal, de Colombia, monseñor Luis Augusto Castro.
La guerrilla mantiene secuestrados a 40 rehenes por motivos políticos, incluida Betancourt y tres estadounidenses y buscan intercambiarlos por unos 500 guerrilleros encarcelados.
El jerarca dijo que actualmente no existe ningún canal de comunicación con las FARC, después de que las Fuerzas Militares de Colombia bombardearon una zona selvática de Ecuador, en un ataque dirigido en el que murió Raúl Reyes, el segundo hombre al mando de esa guerrilla.
Reyes era el portavoz del grupo rebelde para tratar el tema de la liberación de los rehenes y el único comandante de las FARC que se hizo visible en los últimos cinco años debido a que los demás se internaron en la selva para evadir una ofensiva militar ordenada por Uribe.
NO DEJEMOS MORIR A INGRID
Castro dijo recibió información de que la política, de 46 años y madre de dos hijos, está gravemente enferma y que su vida corre peligro.
Por su parte el secretario de la Comisión de Conciliación Nacional, padre Darío Echeverri, quien en el pasado se reunió con comandantes de las FARC, pidió al grupo rebelde no dejar morir a Betancourt.
"Que las FARC se apoyen en cualquier obispo. No dejemos morir a Ingrid. Quisiera llegarle al oído, queremos llegar para colaborar," declaró el religioso.
La hermana de la política, Astrid Betancourt, dijo que su hermana debe estar débil físicamente pero no ha claudicado en su fortaleza mental y espiritual.
"Ella se agarra a las fuerzas de donde no tiene para resistir, ella tiene esa voluntad de resistir. Primero está ese gran amor por sus hijos y por mi mamá (...) ese gran compromiso con Colombia, Ingrid quiere vivir," declaró.
La ex parlamentaria Gloria Polanco, liberada en febrero después de más de seis años de secuestro, instó a la ex candidata presidencial resistir como se lo pidió a ella en varias ocasiones cuando se sintió desfallecer en medio de la selva al enterarse del asesinato de su marido.
El esposo de Betancourt, Juan Carlos Lecompte, dijo que con la propuesta a la guerrilla el Gobierno está tratando de salvar su responsabilidad frente a un eventual desenlace fatal.
"Están diciendo, nosotros hicimos todo lo que pudimos, en el fondo no están solucionando el problema, es como una solución del problema hacia la opinión pública," afirmó.
El ex presidente Ernesto Samper, quien gobernó Colombia entre 1994 y 1998, pidió a las FARC que liberen a Ingrid a través del presidente venezolano, como lo hicieron con los seis políticos que entregaron entre enero y febrero.
El periodista Digital
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