26 de septiembre, 2012. (Romereports.com) Benedicto XVI ha vuelto a la plaza de San Pedro para la Audiencia general del miércoles, esta vez ante 10.000 personas.
El Papa comenzó un nuevo capítulo en su catequesis sobre la oración. Tras varios meses refelxionando sobre la oración en la Biblia, explica ahora la liturgia como escuela de oración.
BENEDICTO XVI
“La primera exigencia de una buena celebración es que haya oración, coloquio con Dios, escucha y respuesta. La mente debe ir concorde con la voz, penetrar en las palabras de la Liturgia, acogerlas y estar en sintonía con ellas. La mirada del corazón debe dirigirse a Dios, elevarse por encima del alboroto de las preocupaciones, angustias y distracciones”.
Benedicto XVI saludó al presidente de la Cámara de los Diputados de Chile que asistió a la audiencia con un grupo de políticos. El Papa les pidió que defiendan el bien común.
BENEDICTO XVI
“...recordando al mismo tiempo a políticos católicos la necesidad de buscar generosamente el bien común de todos los ciudadanos, y de modo coherente con las convicciones propias de hijos de la Iglesia”.
Entre los peregrinos un coro australiano que interpretó esta curiosa canción. Tras varios meses la audiencia volvió a celebrarse en la Plaza de San Pedro, lugar habitual cuando el número de asistentes es elevado y no caben en el aula Pablo VI.
26 de octubre, 2012. (Romereports.com) Benedicto XVI ha vuelto a la Plaza de San Pedro para presidir la Audiencia general del miércoles ante más de 10.000 personas. El Papa lleva varios meses haciendo una catequesis sobre la oración impulsada en la Sagrada Escritura y ahora ha comenzado una nueva etapa sobre la oración apoyada en la liturgia de la Iglesia.
TEXTO DE LA CATEQUESIS EN ESPAÑOL:
La catequesis de hoy presenta la Liturgia como lugar privilegiado de encuentro con Dios Padre, en Cristo y en el Espíritu Santo, como un diálogo de gestos y palabras. Por ello la primera exigencia de una buena celebración es que haya oración, coloquio con Dios, escucha y respuesta.
La mente debe ir concorde con la voz, penetrar en las palabras de la Liturgia, acogerlas y estar en sintonía con ellas. La mirada del corazón debe dirigirse a Dios, elevarse por encima del alboroto de las preocupaciones, angustias y distracciones. Abrirse dócilmente a la palabra y recogerse en la oración de la Iglesia, de modo que las palabras que se dicen conduzcan a Dios, hagan del propio corazón un altar.
Saludo cordialmente a los peregrinos de lengua española, en particular a los grupos provenientes de España, México, Panamá, Costa Rica, Chile, Puerto Rico, Colombia, Argentina y otros países latinoamericanos. Saludo asimismo de modo especial al Presidente de la Cámara de Diputados de Chile, Señor Nicolás Monckeberg Díaz, acompañado de un grupo de parlamentarios, de visita en Roma, recordando al mismo tiempo a los políticos católicos la necesidad de buscar generosamente el bien común de todos los ciudadanos, y de modo coherente con las convicciones propias de hijos de la Iglesia.
Invito en fin a todos a celebrar y vivir la liturgia con actitud orante, uniéndonos al Misterio de Cristo y a su diálogo filial con el Padre. Muchas gracias.
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