El conocido como 'cura rojo', Enrique de Castro, que se niega a cerrar la parroquia de Entrevías pese a la orden del Arzobispado de Madrid, informó hoy de que 'en unos pocos minutos' había firmado 'tantos ejemplares como en ediciones anteriores de la Feria del Libro'.'Parece que hay que organizar una movida fuerte para vender libros', declaró a Efe el sacerdote en los jardines del Retiro, donde firmaba volúmenes de su última obra, titulada 'Dios es ateo.
La fe y la estafa'.
El revuelo mediático que ha suscitado el cierre de la parroquia de San Carlos Borromeo, por entender la jerarquía eclesiástica que no se ajusta a la ortodoxia de la liturgia, ha incrementado el número de ventas de todas las publicaciones escritas por De Castro.
'Me piden dedicatorias típicas, como las de 'con cariño', aunque el primero de la tarde de hoy me ha pedido algo para reflexionar, así que le he escrito una frase sobre la fe en el ser humano desnudo', comentó el párroco.
De Castro informó de que la iglesia, inaugurada hace 26 años y que se ha rebelado contra la cúpula eclesiástica de Madrid, permanece abierta 'a pesar de las informaciones aparecidas en algunos medios de comunicación'.
Esta tarde, la tranquilidad del puesto de Ediciones Populares se vio interrumpida por dos jóvenes, vestidos con camisetas con imágenes de Benedicto XVI acompañadas del lema 'empápate', quienes acusaron al religioso de no tener 'vergüenza' y de 'dar de comulgar a gentuza'.
'No le da vergüenza, como sacerdote, haber escrito esto y dar la comunión a gentuza como Zerolo; irá al infierno', aseveró uno de los muchachos.
Ambos reprocharon al cura que permitiera comulgar al secretario de Movimientos Sociales del PSOE, Pedro Zerolo, quien, recientemente, asistió acompañado por el ex ministro de Defensa José Bono, a una misa de apoyo a la parroquia de San Carlos Borromeo, en el barrio madrileño de Entrevías, apercibida de cierre en su actividad litúrgica por el Arzobispado.
De Castro, que ha desatendido la orden del cardenal arzobispo de Madrid, Antonio María Rouco Varela, confesó a EFE que temía que 'algo así pudiera ocurrir durante este acto'.
'A la iglesia no se atreven a ir, aunque ésta es la primera vez que me pasa', comentó el sacerdote, quien contestó amablemente a los jóvenes y les invitó a mantener una conversación en otro momento, si bien se vio obligado a desistir de su intento ante los insultos.
Varios ciudadanos, que se detuvieron a hojear los libros de la caseta de Ediciones Populares en los jardines del Retiro, se mostraron sorprendidos por la actitud agresiva de los jóvenes y se enfrentaron a ellos.
'Cómo te puedes llamar cristiano y mostrar tal falta de respeto', aseveró una lectora, quien, como muestra de su apoyo, compró un ejemplar del último libro del 'cura rojo'.
Fuente: El Periodista Digital
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