Texto Bíblico
Apocalipsis 12, 1Apareció en el cielo una señal grandiosa: una Mujer, vestida de sol, con la luna bajo sus pies y en su cabeza una corona de doce estrellas.
Reflexión de S.S. Benedicto XVI
“María fue elevada al cielo en cuerpo y alma… El cielo ya no es para nosotros una esfera muy lejana y desconocida. En el cielo tenemos una madre. Y la Madre de Dios, la Madre del Hijo de Dios, es nuestra madre. Él mismo lo dijo. La hizo madre nuestra cuando dijo al discípulo y a todos nosotros: “He aquí a tu madre.” En el cielo tenemos una Madre. El cielo está abierto; el cielo tiene un corazón.”
(Homilía. Solemnidad de la Asunción de la Santísima Virgen. Castelgandolfo. Lunes 15 de agosto de 2005)
No comments:
Post a Comment