El Obispado de San Felipe entregó este viernes una Declaración Pública en torno a la situación que afecta al Pbro. Juan Carlos Orellana, sacerdote diocesano que ha sido formalizado por abuso sexual impropio contra una niña de 17 años de edad.
La diócesis dejó en claro que en cuanto se tuvo conocimiento de este hecho, como medida cautelar, el sacerdote fue suspendido en el ejercicio de su ministerio. Hoy viernes, al conocerse esta formalización en los tribunales, se ha dispuesto la realización de una investigación canónica, conforme a los procedimientos establecidos en el ordenamiento jurídico de la Iglesia.
En la declaración, el Obispado expresa su mayor disposición para colaborar en la investigación que lleve a cabo la justicia civil.
"Por el bien de la comunidad, pedimos respeto para todas las personas que de algún modo sufren con esta dolorosa situación, y una especial prudencia en el tratamiento de la misma. Reafirmamos nuestra cercanía y preocupación hacia la persona afectada y su familia. Las puertas de la Iglesia diocesana están abiertas para ellos", señala la nota, que ha sido leída a la prensa este mediodía por el Pbro. Cristián Guarda, director del Departamento Pastoral de Comunicaciones en la diócesis.
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Fuente: Comunicaciones San Felipe Iglesia.cl
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