Texto Bíblico
San Marcos 16, 19
El Señor Jesús, después de hablar a sus discípulos, fue elevado al cielo y se sentó a la diestra de Dios.
Reflexión de S.S. Benedicto XVI
“Como Cristo resucitó de entre los muertos con su cuerpo glorioso y subió al cielo, así también la Virgen santísima, a Él asociada plenamente, fue elevada a la gloria celestial con toda su persona. También en esto la Madre siguió más de cerca a su Hijo y nos precedió a todos nosotros... La Asunción de la Virgen María constituye para todos los creyentes una ocasión propicia para meditar sobre el sentido verdadero y sobre el valor de la existencia humana en la perspectiva de la eternidad. Queridos hermanos y hermanas, el cielo es nuestra morada definitiva. Desde allí María, con su ejemplo, nos anima a aceptar la voluntad de Dios, a no dejarnos seducir por las sugestiones falaces de todo lo que es efímero y pasajero, a no ceder ante las tentaciones del egoísmo y del mal que apagan en el corazón la alegría de la vida.”
(Ángelus. Solemnidad de la Asunción de María. Lunes 15 de agosto de 2005)
No comments:
Post a Comment