Monday, March 30, 2020

ORACIÓN: Desprendimiento


Dulzura de sentirse cada vez más lejano.
Más lejano y más vago... Sin saber si es porque
las cosas se van yendo o es uno el que se va.
Dulzura del olvido como un rocío leve
cayendo en la tiniebla... Dulzura de sentirse
limpio de toda cosa. Dulzura de elevarse
y ser cómo la estrella inaccesible y alta,
alumbrando en silencio...

¡En silencio, Dios mío!...
Dulce María Loynaz
pastoralsj

#YOMEQUEDOENCASA


Fe Adulta

No te rindas


No te rindas que la vida es eso,
Continuar el viaje,
Perseguir tus sueños,
Destrabar el tiempo,
Correr los escombros,
Y destapar el cielo.
No te rindas, por favor no cedas,
Aunque el frío queme,
Aunque el miedo muerda,
Aunque el sol se esconda,
Y se calle el viento,
Aún hay fuego en tu alma
Aún hay vida en tus sueños.
Porque la vida es tuya y tuyo también el deseo
Porque lo has querido y porque te quiero
Porque existe el vino y el amor, es cierto.
Porque no hay heridas que no cure el tiempo.
Abrir las puertas,
Quitar los cerrojos,
Abandonar las murallas que te protegieron,
Vivir la vida y aceptar el reto,
Recuperar la risa,
Ensayar un canto,
Bajar la guardia y extender las manos
Desplegar las alas
E intentar de nuevo,
Celebrar la vida y retomar los cielos.
No te rindas, por favor no cedas…
Mario Benedetti
Nano Crespo
Nova Bella

Orar para estar cerca de Dios (Jn 8,1-11) por Santi Casanova

¿Se puede ser misericordioso sin estar cerca de Dios? ¿No nos saldrá la vena farisea por todos los lados? ¿Y se puede estar cerca de Dios sin orar con frecuencia y en silencio? ¿No engañaremos a nuestro espíritu con migajas de activismo?
Eso me sugiere el Evangelio de hoy, donde la mujer adúltera es perdonada por Jesús y por los hombres que, avergonzados, deciden al final no condenarla. Me llama la atención el contexto en el que sitúa Juan este episodio y ese comienzo: «En aquel tiempo, Jesús se retiró al monte de los Olivos. Al amanecer se presentó de nuevo en el templo, y todo el pueblo acudía a él, y, sentándose, les enseñaba.»
Jesús llevaba a plenitud la Ley de Moisés transparentando a un Dios misericordioso y enseñándonos que justicia y misericordia son dos caras de la misma moneda. Pero, ¿cómo? ¿No tendría algo que ver esa actitud permanente de Jesús de retirarse a orar, de dedicar tiempo a estar cerca de su Padre, a escucharle y hablar con Él.
A veces quiero cambiar cosas en mi vida y quiero ser yo de otra manera… pero sin poner los medios para ello. Quiero pero no quiero. Busca la salida, la perfección, la felicidad… busco ser Cristo para los demás sin dedicarle demasiado tiempo a intimar con Dios. Tiene pinta de ser imposible. Una misión vacía de oración es un espejo de la mentira.
Un abrazo fraterno – @scasanovam

Lo que cura la esperanza por Pablo Martín Ibáñez



Vivimos días raros. Días en los que ser héroe es quedarse en casa para que, quienes no pueden hacerlo, no se vean en la obligación de ser aún más héroes. También son días en los que la soledad es a la vez un don y un castigo. En los que echamos de menos: a personas, sobre todo a personas, pero también rutinas, momentos, caprichos…

Y para responder a esta anómala situación, desde el inicio del confinamiento en España han surgido decenas de iniciativas: para rezar, pero también para acompañar, para hacer comunidad, para apoyar a unos o a otros. Los aplausos a las 20:00 h, las eucaristías en streaming, los retos con un rollo de papel higiénico, los conciertos de Instagram. Todo ayuda.

Por supuesto, la mayoría de iniciativas no surgen por generación espontánea. Detrás de cada una de ellas hay un esfuerzo de varias personas que piensan, trabajan, se dejan las horas desde casa para que todo tengas un sentido y sirva para un fin; para que esa conexión a YouTube sea lo mejor posible; para que esa meditación u homilía sirva a quien lo oye.

¿Y por qué lo hacen? ¿Por qué no aprovechan el confinamiento para estar en casa tranquilamente, leyendo o haciendo eso que siempre quisieron hacer y nunca pudieron? ¿Por qué no explorar todo el catálogo de Netflix a sabiendas de que cuando todo esto acabe, volverán a la rutina imposible?

Porque es importante mantener la esperanza. «La esperanza no cura», me decía un amigo, escéptico ante iniciativas de tipo religioso y cultural. Pues no, la esperanza no cura el cuerpo, para eso están los médicos y la responsabilidad de cada uno de tomar las precauciones necesarias. Pero la esperanza alimenta el fuero interno. Y en estos días la esperanza es el bien intangible más necesario.

Porque si dedicas 12 o 14 horas en un hospital a atender docenas de pacientes sin apenas medios, la esperanza es la que te empuja a hacerlo con una sonrisa, a pesar de la extenuación y el miedo. Porque si tu esposo o tu mujer se ponen enfermos, la esperanza te ayudará a mantenerte lo más fuerte y sereno posible. También la esperanza está para no sucumbir al sufrimiento por los que se van. Porque sin esperanza, y a falta de abrazos, la vida se pone muy cuesta arriba.
Quién iba a decirnos que la palabra en 2020 iba a adquirir un peso tan enorme. Somos más responsables que nunca de que nuestra palabra transmita algo. De que nuestra palabra sea abrazo, caricia y calor. De que nuestra palabra sea, en definitiva, esperanza.
La esperanza no cura, no. O al menos no en el sentido físico. Pero hoy, sin esperanza, no saldríamos de esta.

Pablo Martín Ibáñez
pastoralsj

Papa Francisco-Misa Casa Santa Marta


Desde la Casa Santa Marta en el Vaticano, Santa Misa presidida por el Papa Francisco

Sunday, March 29, 2020

La película "I Am Patrick" da vida al famoso patrón de Irlanda


San Patricio es uno de los santos más populares del mundo. Lo conocen creyentes y no creyentes. Ahora su historia cobra vida en la película "I Am Patrick", “Yo soy Patricio”.
“Para que yo pueda venir a las naciones irlandesas, a predicar el Evangelio”.
GORDON ROBERTSON
Productor Ejecutivo "I Am Patrick"
“Fue capturado en Gran Bretaña cuando era un niño de 16 años. Los piratas irlandeses lo llevaron a la isla y lo vendieron como esclavo. Pasó seis años como esclavo, y durante ese tiempo, en lugar de quejarse, aprendió a escuchar la voz del Señor”.

La cinta combina recreaciones históricas, entrevistas con expertos y los propios escritos del santo, para contar la vida de un hombre que entregó todo a Dios.
“¿Por qué este hombre se pondría en peligro entre enemigos que no conocen a Dios?”
“La gente pensaba que esta misión era una locura, que sus esfuerzos por cristianizar Irlanda estaban condenados al fracaso".
GORDON ROBERTSON
Productor Ejecutivo "I Am Patrick"
“Espero que inspire a personas que no creen en Dios, que les enseñe a rezar. Que digan: 'Dios, veo lo que hiciste a San Patricio. Veo que le hablaste. Veo que lo salvaste cuando era esclavo. ¿Podrías hablarme? ¿Podrías mostrarme tu presencia? ¿Podrías ser mi salvador? Estas son las preguntas que espero que la película inspire a personas en todas partes”.

A pesar de estar ambientada en la Irlanda del siglo V, la vida de San Patricio sigue siendo un ejemplo de fortaleza y perseverancia ante desafíos de hoy.
GORDON ROBERTSON
Productor Ejecutivo "I Am Patrick"
"San Patricio es un personaje para hoy, para el mundo moderno. Es alguien que inspirará a la gente a asumir el reto de decir: 'Aquí estoy yo. Envíame' ".

Como muchos cines están cerrados debido a la emergencia sanitaria, la película estará disponible en Internet. Mientras tanto, en su web iampatrick.com se puede comprar el DVD.
CT
Traducción: Daniel Díaz Vizzi

Papa Francisco - Oración del Ángelus 2020-03-29


Desde la Biblioteca del Palacio Apostólico, el rezo de la Oración del Ángelus, dirigido por el Papa Francisco

Papa Francisco-Misa Casa Santa Marta 2020.03.29


Desde la Casa Santa Marta en el Vaticano, Santa Misa presidida por el Papa Francisco

Las «otras» redes sociales por Luis Delgado sj



Normalmente, si hablamos de 'redes sociales' entendemos que nos referimos a las aplicaciones como Twitter, Instagram o Facebook. Pero más allá de eso es un concepto que se refiere al conjunto de personas con las que interactuamos: la familia, los compañeros de trabajo, la gente con la que compartimos clase, o incluso toda la ciudad en la que vivimos. Es evidente que interaccionamos a distintos niveles en cada una de ellas, pero con toda la gente de cada uno de estos grupos hay algún tipo de interacción. Las personas con las que estamos de algún modo relacionados forman nuestras redes sociales.
En las redes sociales digitales se transmiten memes o vídeos populares a una velocidad tremenda. Hacen gracia o muestran algo impresionante, gustan mucho, se comparten y por eso se extienden tan rápidamente que los llamamos virales. De un modo no muy diferente ocurre con las noticias familiares. Cuando hay una boda o un embarazo, los directamente implicados deben cuidar mucho para ser ellos quienes den la noticia, porque es fácil que se extienda y al final la gente se entera por terceras personas. Es natural querer compartir una buena noticia.
La cuarentena que nos toca vivir busca cortar en lo posible el contacto físico en esas relaciones porque nos encontramos ante una realidad que se transmite muy fácilmente de persona a persona, y no solo con la cercanía directa, sino a través de superficies de contacto común. Y pasamos a mantener el contacto con nuestras redes sociales a través de medios digitales.
Y empezamos a descubrir nuevas maneras de comunicarnos con algunos, modos que antes no usábamos con esas personas. Hay con quien antes hablábamos por teléfono, pero con quien quizá nunca usamos una webcam, y es la forma que hemos encontrado ahora de fortalecer esa relación. En otros casos retomamos una comunicación que estaba adormecida, quizá tímidamente con sólo un «qué tal?» por WhatsApp, o llamando a alguien con quien no hablábamos tan frecuentemente. A veces preguntando a la otra persona por eso de lo que no suele hablar pero que está deseando compartir. Otra forma de reanimar una relación que estaba latente.
Tomar conciencia de estos pequeños gestos nos da una gran luz en esta situación en la que muchos ven oscuridad. Dios nos sigue hablando a través de nuestras distintas redes sociales. Por supuesto en las que nos hacen compañía física y de las que tenemos la oportunidad de cuidar más directamente, pero también en aquellas que en la distancia nos invita a fortalecer.
Luis Delgado sj
pastoralsj

Saturday, March 28, 2020

Dime una Palabra por Luis Fernando Crespo SM. Mi causa


28 de marzo
Sábado IV de cuaresma

Jr 11, 18-20 A ti he confiado mi causa
Así es Señor. Desde siempre y por siempre en tus manos está la causa de la humanidad. Más allá de mi pobre comprensión. Se que tú eres Dios. Que eres amor. Señor, Dios mío, a ti me acojo, líbrame de mis perseguidores y sálvame.

Luis Fernando Crespo SM
Dime una Palabra

Thursday, March 26, 2020

Ante el coronavirus… ¿rezar sirve de algo? por Jesús Miguel Zamora



No cabe duda de que estamos viviendo días malos. Y más cuando la enfermedad o el fallecimiento de un ser querido, golpea a las puertas de nuestras casas, comunidades, espacios compartidos, etc.

Y en muchos casos desde varias instancias, se nos invita a no cejar en nuestro empeño, para que los que creemos en Dios Padre bueno, insistamos en la oración para que esta situación no se prolongue mucho y que ese mismo Dios, al que elevamos nuestros ojos, acoja con cariño, como él sabe, a los que dejan este mundo por la enfermedad que nos asola y dé consuelo y fortaleza a los que padecen el efecto del contagio.
Con todo, y desde una mentalidad muy racional, acaso muchos pueden echarnos en cara que “mucho rezar, pero Dios no hace nada por disminuir esta pandemia”. Me quedo un poco extrañado de que algunos piensen así, aunque son muy libres de hacerlo y no les voy a enmendar la plana. No.
Pero sí se me ocurren algunas reflexiones al hilo de la “eficacia” de la oración en estos momentos de sufrir la pandemia. Es verdad que no por rezar más (o dedicar más tiempo a ello), parece que disminuye la voracidad del virus. Pero se me ocurren estas reflexiones (alguno dirá que menos reflexiones y más actuaciones prácticas). Vale, lo acepto, pero ¿está reñido que uno piense como sigue, no para acallar la conciencia sino con el ánimo de aportar, si se puede y vale, algo de consuelo? Por eso lo hago.

¿Quién es Dios?

1.- A Dios no se le puede manipular burdamente como si fuera automático que, rezar, orar con mucha fe, nos respondiera a nosotros disminuyendo la pandemia. Dios se convertiría en un “títere” a merced de nuestros caprichos; pues lo que hoy es una necesidad, mañana podría ser un antojo. Y si no nos lo concede “nos enfadamos” con Él. No, no puede ser ese el Dios en quien creo.
2.- Dios es mucho más que nuestros deseos. Y nos ha dejado tanta libertad, tanta, que desea que seamos nosotros los que vayamos aclarando lo que nos pasa, encontremos remedio a lo que nos sucede, seamos capaces de desplegar toda la iniciativa a nuestro alcance para paliar las situaciones que más daño hacen, como la que estamos viviendo. ¡Nos respeta!, aunque algunos puedan pensar que está ausente de nuestros desasosiegos y quisiéramos verle actuar de manera más directa. Pero, entonces, si este Dios que nos ha dado algo tan valioso como la libertad, cuando viera que andamos mal, ¡que actúe! y ¿cambie su promesa? Volveríamos a pensar que es un Dios marioneta del que no nos podemos fiar.
3.- Yo rezo y traigo a mi recuerdo a las personas que sufren, que mueren, que pasan por una situación angustiosa de trabajo o pérdida de tranquilidad ante el futuro. Y le digo a Dios “que no se olvide de ellos”. ¡Valiente pretensión!, pienso yo, porque ¿cómo Dios va a olvidarse de ellos, especialmente de los que peor lo pasan? Pero el hecho de recordarlos, de traerlos a mi memoria en un momento de oración, me hace mas solidario, más pequeño, me une más a ellos. Y eso no me tranquiliza con solo pensarlo, sino que estimula mi capacidad de verme hermano de ellos, aunque ¡no pueda hacer nada por devolverles la vida o la salud! Pero no es un gesto inútil; sí es fraterno (en eso de “… entra en tu habitación y tu Padre que ve lo escondido, sabrá cómo actuar…” Mt 6,4).
4.- Pero hay otra cosa que en estos días llevo pensando y actúa de acicate en mi oración por todos. Decía que traerlos al recuerdo en la presencia de Dios no los cura. Pero imaginaba esa otra situación que hoy, por desgracia, vivimos acaso menos de lo que se pudiera por elementos de contagio. Decía que me imagino a ese ser querido que está en la cama, entubado o detrás de una mampara y que ha visto (o sabe) que ahí detrás o en casa hay alguien que está pensando en él… Que no le va a curar, pero sabe que está ahí, presente o ausente. Ahí. Aunque el enfermo no se dé cuenta, quizá.
Y me he imaginado que, en este caso, no soy yo el que va a la capilla a rezar, a encontrarme con Dios, sino que Dios viene a encontrarse conmigo. Y aquí viene lo grande: en ese recuerdo que tengo por los que lo están pasando peor, Dios viene a encontrarse con ellos, gracias quizá a mi recuerdo (sin manipular a Dios, sino suponiéndolo) y está con ellos, al lado de la cama, sin decir nada, sin “contagiar” nada como el padre, la madre o el ser querido al lado de la cama del enfermo.
Supongo que no es cuestión de espacios, de aquí o allí, o acaso sea una construcción mental mía, pero como no puedo despojarme de mi ser humano, me vale pensarlo así. Dios viene a visitarme. Dios viene a visitar a los que recuerdo. Dios se hace presente a los que sufren. Entramos en comunión en presencia de Dios. Dios sigue dejando hacer. Está ahí al lado. Sin más. Casi nada, tan humano que solo Dios puede estar así. Pero su recuerdo creo que puede consolar, como consoló en el trance fuerte la muerte a Jesús, cuando se sintió solo. “… pero no se haga mi voluntad sino la tuya” (Lc 22,42) y Jesús no se libró de morir…
Por eso, me parece que es bueno rezar por los que lo pasan peor estos días. Al menos, a mi no me consuela, pero creo que me hace un poco más fraterno y hermano de los que sufren, aunque no les conozca. Me basta saber que Dios les visita y acompaña, en silencio. Pero ahí está, aunque no se note.
Al menos lo creo así y voy a seguir haciéndolo así. Es una forma de arrimar el hombro. Si os vale a otros, adelante. Si no, pues no hay problema.

Vida Nueva

ORACIÓN: Desde la fragilidad



Señor, tú has sido un refugio para los seres humanos
de generación en generación.
Desde antes de que surgiesen los montes,
antes de que naciesen tierra y cielo
tú estabas ahí, Señor

Nuestra vida pasa rápido
Mi años ante tus ojos
son un ayer que pasó,
un suspiro en la noche.

Tú ves nuestros secretos,
tú desnudas nuestras pequeñeces.
Vivimos vidas largas, y en ellas
hay mucho de vacío y vanidad,
hay tantas cosas que se desvanecen
y pasan rápido.

Enséñanos a vivir desde lo profundo,
que lo verdaderamente importante
llene nuestra cabeza y nuestro corazón
Ilumínanos, Señor, enseña a tus hijos.

Sácianos con tu amor cada día
y entonces gozaremos y cantaremos de por vida.
Llénanos de sentido si alguna vez nos ha faltado,
danos paz cuando la hayamos perdido.
Que sepamos descubrir tu acción y tu esplendor.
Haz que de nuestra vida surjan obras dignas.

Señor, tú has sido un refugio para los seres humanos
de generación en generación.
Adaptación del Salmo 90
pastoralsj

JESUITAS: Eucaristía 26 de marzo. Jueves de la cuarta semana de cuaresma

Dime una Palabra por Luis Fernando Crespo SM Vida en ti


26 de marzo
Jueves IV cuaresma

Ex 32, 7-14 Multiplicaré vuestra descendencia como las estrellas del cielo
Creo en ti, Señor. Creo en tu palabra. Creo en tu promesa. Se que haces fecunda mi vida y multiplicas mi descendencia, que es la tuya, como las estrellas del cielo. Se que me das una tierra prometida, para que la posea para siempre. La tierra de la vida eterna, la fecundidad de vivir por siempre en ti. Mi vida en tus manos. Sea lo que sea, te doy las gracias.

Luis Fernando Crespo SM
Dime una Palabra

La ilusión de estos días por Álvaro Zapata sj



Esta crisis para muchos comenzó con una cascada de cancelaciones y huecos en blanco que han ido floreciendo en la agenda. Tuvo un punto de locura la semana previa a la cuarentena, pero lo cierto es que también, antes de ser plenamente conscientes de la gravedad de lo que se nos venía encima, hubo cierto alivio. Compromisos que no nos apetecían mucho, actividades que manteníamos por inercia, romper con ciertas rutinas…
Y la segunda fase vino nada más empezar la cuarentena. Una nueva cascada de cosas por hacer, nuevos modos de hacerse presente en una cotidianidad que había quedado entre paréntesis: teletrabajo, voluntariados a distancia, videollamadas, y toda una serie de momentos compartidos balcón a balcón. No tardaron en correr los memes que nos reflejaban en la hiperactividad del momento, en los que proclamábamos nuestro derecho a aburrirnos e hibernar un poco. El imprevisto parón nos condujo a un impulso para llenar esos huecos en blanco, con ganas, con una energía que hacía tiempo no notábamos, quizás, en nuestro quehacer diario. Nos enfrentábamos a la posibilidad de crear cosas nuevas, modos distintos de estar cerca, nuevas actividades… Esos huecos en blanco fueron de repente espacio germinante, tierra fecunda en la que están cabiendo centenares de iniciativas pastorales y solidarias, dejando atrás perezas e inercias. Desde oraciones vía Instagram de la mano de #EncasaconDios o conventos de clausura que se han puesto a coser mascarillas a jóvenes que se arremangan para llevar la compra a sus vecinos mayores, o voluntarios del teléfono de la esperanza que montan la centralita en casa.
Todo tiene un aire nuevo, una ilusión de recién estrenado, una especie de olor a septiembre, en el que nos hemos saltado las planificaciones y las programaciones para saltar directamente a la pista. Confiados en que nos mueve el bien común y que cualquier fallo lo podremos ir advirtiendo y corrigiendo por el mismo camino.
Nuestra vida ya no era la misma, ya no lo es, porque nuestro quehacer diario ya no lo es. Y ahora, empieza, quizás, a brotar un nuevo sentimiento: esto merece la pena. De algún modo, recordamos aquel chiste recurrente, cuando la pandemia era algo que solo veíamos en las noticias: «te puedes lavar las manos, aunque no haya una pandemia». Nos decimos: esto lo podemos seguir haciendo, incluso si no hay una pandemia. Podemos continuar en este impulso renovador. Incluso debemos, me atrevo a decir. Está lejos todavía, parece, la fase en que daremos continuidad a lo empezado estos días, pero no la perdamos de vista. No caminemos desde la provisionalidad, sino desde el sentimiento de que estamos haciendo nuevas las cosas, estamos construyendo y poniendo los cimientos de un nuevo modo de vivir en sociedad que todavía desconocemos en sus detalles, pero al que ya estamos dando forma.
Álvaro Zapata sj
pastoralsj

Papa Francisco-Misa Casa Santa Marta 2020.03.26



Wednesday, March 04, 2020

JESUITAS: Gran Bretaña. Compromiso de los jesuitas para reducir el daño del cambio climático

Demonstrators from Extinction Rebellion and Parents 4 Future march in a joint protest over climate change, in London

Manifestantes de la “Extinction Rebellion” y “Parents 4 Future” marchan en una protesta conjunta sobre el cambio climático, en Londres

La Compañía de Jesús del Reino Unido ha anunciado que desinvertirá sus acciones financieras de las industrias cuyos mayores ingresos provienen del uso de combustibles fósiles. La decisión es una iniciativa concreta para combatir el cambio climático y el consiguiente calentamiento global.

Ciudad del Vaticano
En respuesta al “claro imperativo moral de actuar para la protección de nuestro planeta para las generaciones futuras”, los jesuitas de Gran Bretaña han decidido renunciar a invertir en sociedades cuya principal fuente de ingresos proviene de la extracción de combustibles fósiles. Esto fue anunciado por el Superior Provincial, el Padre Damian Howard, reiterando que “el cambio climático es el desafío más urgente que el mundo debe afrontar en un momento en que los desastres climáticos están causando cada vez más destrucción, golpeando duramente a los países más pobres, aunque rara vez son la causa”.

Actuar juntos lo antes posible

“Lo que ocurra a nivel climático y medioambiental tendrá implicaciones negativas para todos nosotros, por lo que debemos actuar juntos lo antes posible para proteger las condiciones de vida”, continúa el sacerdote, esperando que “los jesuitas puedan contribuir a este esfuerzo común”.
Según informa el Osservatore Romano, en Gran Bretaña, la Compañía de Jesús gestiona los recursos utilizados para financiar obras y proyectos de caridad en el país y en todo el mundo. El capital, administrado por tres gerentes, será totalmente desinvertido a finales de 2020, completando así el proceso ya iniciado para más de la mitad de las participaciones.

El planeta enfrenta una grave emergencia climática

Dado que diversos estudios científicos demuestran que todo el planeta se enfrenta a una grave emergencia climática, el padre Howard hace un llamamiento a “todas las instituciones para que reaccionen ante esta crisis ecológica y adopten medidas valientes para reducir el consumo de energía y pasar a las fuentes renovables”. Asimismo, pide a los grandes inversores en particular que “hagan todo lo posible para ayudar a evitar las graves consecuencias que podrían derivarse”.

El mundo debe responder a los enormes desafíos

A este respecto, la Compañía de Jesús también hace un llamamiento al gobierno británico “para que tome medidas urgentes para reducir las emisiones de carbono y animar a otras naciones a seguir el mismo camino”, especialmente en vista de la próxima Conferencia de las Naciones Unidas sobre el Clima (Cop26) que se celebrará en Glasgow el próximo mes de noviembre.
“El mundo debe responder a los enormes desafíos y oportunidades del cambio climático con mucha más urgencia”, comentó Paul Chitnis, Director de las misiones jesuíticas del Reino Unido. Con ello, aseguró que el impacto del cambio climático se ve reflejado “en las comunidades de todo el mundo” siendo “los más pobres y marginados los que más sufren”, por cual, espera que “el Reino Unido cumpla con sus compromisos climáticos”.

Una acción mundial

En Madagascar, Efa Ravelonantoandro, jefe de programas del Centro Social Arrupe, testifica que en el sur del país “es ahora demasiado caluroso y el número de desplazados internos está creciendo”. A esto se le suman las continuas inundaciones, causando cada vez la propagación de enfermedades entre la población. En el país de África Oriental, hay muchos ríos, pero no se está “generando suficiente energía renovable”, declara.
Además de Gran Bretaña, los jesuitas del Canadá, Italia y Australia han decidido reducir el carbón de sus inversiones, así como el Jesuit european social center, de Bruselas y la red ecológica de justicia de los jesuitas en África, con sede en Nairobi (Kenya). Mientras tanto, el mes pasado, en el Reino Unido, Middlesbrough y Lancaster fueron las primeras diócesis del país en renunciar a sus inversiones en combustibles fósiles.
Vatican News

JESUITAS: Pedro Calatayud, el jesuita que denunció el capitalismo salvaje de Bilbao en el siglo XVIII

Grabado anónimo que representa al predicador y escritor jesuita Pedro Calatayud./

Grabado anónimo que representa al predicador y escritor jesuita Pedro Calatayud.

Las agresivas prácticas de los comerciantes bilbaínos fueron objeto de duras censuras del sacerdote navarro, que no dudó en condenarlas como pecado mortal. Desde la villa se respondió exigiendo que se retirara su libro

A mediados del XVIII Bilbao vivía una época de bonanza comercial. Desde comienzos de siglo la villa se había hecho con el monopolio de la exportación de lana de Castilla que salía por el norte de España. La actividad de los comerciantes bilbaínos era particularmente intensa. En sus negocios en las ferias castellanas o en la venta del hierro mostraban una gran agresividad. Este periodo se recordaría como el de la consolidación del poder político y económico de Bilbao. A mediados del XIX alguno lamentaba que ya no hubiera tanta riqueza en la villa como entonces, aunque quizás la percepción no era del todo exacta.
Sin embargo, la acometividad comercial de los bilbaínos fue objeto de alguna crítica feroz, que la condenó por inmoral: lo que hoy llamaríamos capitalismo salvaje. No fue una valoración anecdótica, pues la diatriba, pormenorizada y extensa, la realizó el padre Calatayud, un jesuita célebre, muy leído: descalificó rotundamente a los negociantes de Bilbao, ante la indignación de estos, que se metieron en pleitos.
Pedro Calatayud, natural de Tafalla, recorría desde 1718 España y Portugal como misionero. En 1732 estuvo en Bilbao, donde participó en un incidente que quizás fue el origen de sus posiciones condenatorias sobre los bilbaínos. Ese año quiso construirse una casa de beneficencia para acoger a los niños huérfanos, que estaban en la calle, lo que alarmaba porque abundaban en Bilbao los «vagabundos y truhanes», atraídos por la prosperidad de la villa, y podían pervertirlos. No llegaron a desembolsarse los fondos necesarios. El Padre Calatayud recaudó limosnas con vistas a construir este establecimiento de caridad y, aunque fueron cuantiosas, no bastaron para acometer la empresa. El asunto preocupaba al predicador.
Dos años después escribía desde Orihuela al Ayuntamiento bilbaíno alentándole a «erigir casa de Misericordia». No fue eficaz su ruego y es posible que esto influyera en su opinión negativa sobre Bilbao, «pueblo en que trabajé y derramé mis sudores por su bien» y que sabía rico, pero incapaz de levantar casa de misericordia. No tenía buen concepto de los bilbaínos.
Calatayud entraba en calificar los negocios desde el punto de vista moral. Sus Doctrinas prácticas mencionaban varias veces las prácticas mercantiles de Bilbao, recriminándolas sin tapujos: «pecan gravemente los Comerciantes de Bilbao y otras partes en lo que llaman socorrer Ferrones», «pecan mortalmente los que usan de un peso para recibir, y comprar, y de otro menor e infiel para dar, v. g. en Bilbao». En otras palabras: los comerciantes bilbaínos prestaban de forma usuraria a los ferrones y utilizaban pesos distintos para comprar y para vender. No era sólo una crítica moral, lo que ya era importante tratándose de una autoridad tan reconocida como el jesuita. Es que hablaba de pecado mortal y esto preocupaba seriamente en la época.
Estas eran las acusaciones más importantes, pero hubo otras. Según Calatayud, pecaban también quienes prestaban a los pescadores con ganancias del 10, 15 y 20%, porque no corrían grandes riesgos, pues la navegación a Bilbao era segura. Y los que organizaban «gavillas de mercaderes», como decía sucedía en Bilbao sobre todo para la compra de grasa de ballena: es decir, los comerciantes se ponían de acuerdo para no comprar por encima de determinado precio, de forma que pagaban 20 por lo que valía 25.
Estas prácticas mercantiles del Bilbao las conocemos por otras fuentes, con casos más extremos que los que citaba el Padre Calatayud, por lo que no hay duda de que arraigaron en Bilbao en el siglo del capitalismo comercial, del que la villa participaba con intensidad. Calatayud entendía que caían en la usura y que los comerciantes tenían la «obligación de restituir lo mal llevado»: el préstamo quedaba globalmente condenado.
Efectivamente, sabemos que los préstamos a ferrones se hacían en condiciones leoninas. El préstamo devengaba cuando menos un interés del 10% anual, altísimo en la época, con el compromiso de que les entregasen la producción, con lo que los comerciantes se aseguraban el negocio. A veces, los intereses equivalían al 20 o del 30%, si tenía que ser al corto plazo de semanas o unos meses, lo que no era infrecuente, por la precariedad del sector ferrón. Además, cuando compraban el quintal que se usaba en Bilbao tenía un peso mayor que el quintal para la venta. La condena moral tenía una doble razón, en la argumentación de Calatayud: el prestamista no corría gran riesgo, porque el ferrón tenía propiedades para resarcirle, si no iba bien la producción; y el daño repercutía siempre sobre los ferrones, que sobrellevaban unos negocios muy ajustados.

«Ricos, sobrados y regalados»

El estilo del Padre Calatayud era muy gráfico. Tras explicar las que considera prácticas usurarios incluía una especie de diálogo.
- «Padre, que yo me expongo al peligro –eran las palabras que atribuía a los comerciantes bilbaínos, para justificarse.
- Respondo, que el peligro es de poca consideración, porque los Ferrones tienen otras fincas de que asirse el acreedor, y sino las tiene lo regular es corresponder el Ferron, y no dexar de pagar […]
- Padre, ¿pues no he de ganar algo?- pone en boca de los comerciantes de Bilbao.
- Sí, pero no tanto –aquí les acusaba de ganar entre el 16 y el 20%, sin correr riesgos- y los Ferrones siempre agobiados, y vosotros siempre ricos, sobrados y regalados».
A lo mejor a los bilbaínos no les desagradaba que los viesen «ricos, sobrados y regalados», pero les incomodó la descalificación moral. El otro «pecado mortal» guardaba relación con los pesos: al comprar, la libra bilbaína pesaba 17 onzas y al vender 16; el quintal 104 o 110 onzas en la compra, y 100 onzas en las ventas, de lo que se derivaba una diferencia entre el 10% y el 16%, ganancia derivada sólo del trampeo con el peso. También pecaban mortalmente los mercaderes y empleados de escritorio que sisaban un tanto en la carga y lo vendían por su cuenta, pérdida que la pagaba luego «el arriero inocente».
Al parecer, eran prácticas habituales en Bilbao. Calatayud entendían que eran legítimas las ganancias hasta el 6%, pero que a partir de ahí se derivaban precios desmesurados y podían considerarse trampas en los negocios y prácticas usurarias: los comerciantes bilbaínos quedaban condenados de forma categórica y sin paliativos.
En Bilbao sentó fatal el libro de Calatayud, que encima tuvo una gran difusión. En realidad, los bilbaínos no negaron las acusaciones, sino que les molestó la calificación moral de pecado mortal, en expresiones que, entendían, dañaba «el buen crédito y esplendor». Además, Calatayud hablaba de una ciudad –cuyo nombre no consignaba- en la que los contratos con lana devengaban beneficios entre el 20 y 25%, una desmesura. Los bilbaínos sospecharon que les estaba señalando, pues Bilbao era el lugar donde se hacían por entonces las principales contrataciones de lana.
Los bilbaínos reclamaron contra el libro. Pidieron que se rectificase, que se les desagraviase… En realidad, se había publicado en 1737, con varias ediciones posteriores, pero fue en 1752 –antes no se habrían enterado- cuando el Consulado y Casa de Contratación de Bilbao se dirigió directamente al padre Calatayud pidiéndole cuentas por algún ejemplo del libro.
El autor no estaba por la labor de cambiar el texto, por lo que desde Bilbao pidieron que se recogiese el libro –es decir, que se requisasen todos los ejemplares- y que se borrase todo lo que atañía a la villa… Algún efecto tuvieron las protestas, pues el año siguiente se desterró a Calatayud «del País Vascuence» y se ordenó que se recogiesen ejemplares del libro.
Hubo pleitos hasta 1766, cuando fueron expulsados los jesuitas y el propio padre Calatayud tuvo que marchar al exilio. Los bilbaínos aceptaron rápidamente el decreto de expulsión, lo que seguramente se explica por el enfado que provocaron las opiniones del sacerdote.
Al margen de la calificación moral que se le diese, el incidente muestra la agresividad comercial de los bilbaínos, que se convirtieron en prestamistas y que no dudaban en recurrir a cualquier recurso para el desarrollo de sus negocios.
Manuel Montero
Tiempo de Historias
El Correo

Ernesto Cardenal, pequeña antología



Publicamos algunos versos del Premio Reina Sofía de Poesía en los que habla sobre el amor, la tierra, la revolución...

Epigramas

Te doy, Claudia, estos versos, porque tú eres su dueña.
Los he escrito sencillos para que tú los entiendas.
Son para ti solamente, pero si a ti no te interesan,
un día se divulgarán tal vez por toda Hispanoamérica
Y si al amor que los dictó, tú también lo desprecias,
otras soñarán con este amor que no fue para ellas.
Y tal vez verás, Claudia, que estos poemas,
(escritos para conquistarte a ti) despiertan
en otras parejas enamoradas que los lean
los besos que en ti no despertó el poeta.

Otra llegada

Fue en la semana después del triunfo.
Veníamos de Cuba
De la celebración del 26 de Julio.
Yo iba recordando el discurso de Fidel
Y aparece de pronto, azul sobre azul, el Momotombo
Libre por primera vez desde la época de los indios.
Los campos cuadriculados, de luces verdes,
Al amanecer.
El lago de Managua sonrosado en ese amanecer,
La pequeña Isla del Pájaro junto a Managua
(También era de Somoza)
Y me doy cuenta que se ve ahora más bello el país.
Y se lo digo a Dora María que va a mi lado
Mirando también extasiada la patria liberada
Este sueño que todos estamos viviendo
Y del que jamás despertaremos.
Antes esta belleza estaba como emborrachada…
Qué bello se ve ahora el país.
Qué hermosa ahora nuestra naturaleza sin Somoza.
Y la emoción de oir sobre el lago rosicler
A la azafata de Cubana de Aviación anunciar
Que vamos a aterrizar
En el Aeropuerto “Augusto César Sandino”.
El avión lleno de comandantes guerrilleros.
Y ahora el bajarse sin temor
(Y por cierto que no andábamos sin pasaporte)
Y llegar a migración, y llegar a Aduana,
Y que le digan a uno “compañero”.

Gethsemani, Ky

(Fragmento)
Ha venido la primavera con su olor a Nicaragua:
Un olor a tierra recién llovida, y un olor a calor,
A flores, a raíces desenterradas, y a hojas mojadas
(Y he oído el mugido de un ganado lejano…)
¿O es el olor del amor? Pero ese amor no es el tuyo.
Y amor a la patria fue el del dictador: el dictador
Gordo, con su traje sport y su sombrero tejano,
En el lujoso yate por los paisajes de tus sueños:
Él fue el que amó la tierra y la robó y la poseyó.
Y en su tierra amada está ahora el dictador embalsamado
Mientras que a ti Amor te ha llevado al destierro.

Salmo 1

Bienaventurado el hombre que no sigue las consignas del Partido
ni asiste a sus mítines
ni se sienta en la mesa con los gangsters
ni con los Generales en el Consejo de Guerra
Bienaventurado el hombre que no espía a su hermano
ni delata a su compañero de colegio
Bienaventurado el hombre que no lee los anuncios comerciales
ni escucha sus radios
ni cree en sus slogans
Será como un árbol plantado junto a una fuente.

Oración por Marilyn Monroe

Señor
recibe a esta muchacha conocida en toda la tierra con el
nombre de Marillyn Monroe
aunque ese no era su verdadero nombre
(pero Tú conoces su verdadero nombre, el de la huerfanita
violada a los 9 años
y la empleadita de tienda que a los 16 se había querido matar
y que ahora se presenta ante Ti sin ningún maquillaje
sin su Agente de Prensa
sin fotógrafos y sin firmar autógrafos
sola como un astronauta frente a la noche espacial.
Ella soñó cuando niña que estaba desnuda en una iglesia
(según cuenta el Time)
ante una multitud postrada, con las cabezas en el suelo
y tenía que caminar en puntillas para no pisar las cabezas.
Tú conoces nuestros sueños mejor que los psiquiatras.
Iglesia, casa, cueva, son la seguridad del seno materno
pero también algo más que eso
Las cabezas son los admiradores, es claro
(la masa de cabezas en la oscuridad bajo el chorro de luz).
Pero el templo no son los estudios de la 20th Century-Fox
que hicieron de Tu casa de oración una cueva de ladrones.
El Cultural
3 de mayo de 2012

Turbas orteguistas boicotean el funeral de Ernesto Cardenal al grito de “traidor”

Funeral de Ernesto Cardenal

  • Irrumpen por la fuerza en la catedral de Managua e insultan y agreden a varias personas
  • El sacerdote y poeta, comprometido con el sandinismo, consideraba al actual régimen una “dictadura”

El sacerdote nicaragüense Ernesto Cardenal, uno de los grandes referentes de la poesía latinoamericana contemporánea, murió el pasado 1 de marzo a los 95 años. Tras fallecer en el hospital de la capital, ayer, día 3, se celebró su funeral en la catedral. Un momento en el que, tristemente, el silencio y el respeto fueron desplazados por los gritos y la violencia.

El lamentable suceso lo protagonizó un grupo de seguidores del régimen de Daniel Ortega, quienes, ante el ataúd de Cardenal (sobre el que se puso la bandera nacional y su legendaria boina), profirieron gritos de “traidor”. Tras obligar a que los restos del religioso no pudiesen salir por la puerta principal, sino por una lateral, zarandearon y agredieron a varias personas de la comitiva, incluidos varios periodistas que estaban cubriendo la celebración.

Compleja relación

Este ha sido el último episodio en la compleja relación entre Daniel Ortega y Ernesto Cardenal, a quienes unió su trabajo conjunto en la revolución sandinista que, en 1979, consiguió tumbar la dictadura de la familia Somoza. El sacerdote se implicó desde el primer momento en el Gobierno de izquierdas, que se mantuvo hasta 1990, y en el que él fue ministro de Cultura.
Esa implicación en la política (junto a otros referentes eclesiales, como Carlos García Godoy, creador de la Misa Campesina) le valieron la suspensión a divinis por parte de Roma, reflejando esta ruptura la icónica imagen de Juan Pablo II en el aeropuerto de Managua, en 1983, abroncando a un Cardenal que se había arrodillado ante él en espera de su bendición.

Hombre libre y de frontera

Pero, como hombre libre y de frontera que siempre fue, comprometido solo con su conciencia y con lo que a su juicio era el mejor modo de abrazar al hombre excluido desde el Evangelio, Cardenal no ha dudado estos últimos años a la hora de romper públicamente con el régimen de Daniel Ortega y su mujer, Rosario Murillo. Teóricos referentes del sandinismo, para el poeta han devenido en “dictadores” que están “reprimiendo a su pueblo”.
Por eso mismo, los admiradores de Cardenal han lamentado la “hipocresía” de Ortega, quien ha decretado tres días de luto nacional. A su juicio, se trata de una maniobra para tratar de apropiarse de su figura, buscando que, en el imaginario colectivo y en el juicio histórico, pesen más sus años de compromiso sandinista que su última fase de opositor ante lo que él entendía que era una traición a los principios revolucionarios, en los que muchos representantes de la Teología de la Liberación trataron de dejar una huella evangélica.

Reconciliado con la Iglesia

Cardenal, eso sí, ha muerto reconciliado con la Iglesia y habiendo recuperado su condición de sacerdote. Fue meses atrás, ya en el hospital, cuando le visitó el arzobispo auxiliar de Managua, Silvio Báez, y le transmitió el perdón papal. A los pocos días, se difundieron imágenes suyas celebrando la eucaristía apoyado en su cama.
Siento mucha indignación por lo ocurrido hoy en la Catedral de Managua en las exequias de P. Ernesto Cardenal. Irrespeto total. De nuevo las turbas de la dictadura muestran su fanatismo y su violencia. Mi solidaridad con personas y periodistas agredidos. ¡Basta de irracionalidad!

Ahora, Báez, obligado a permanecer fuera de Nicaragua por sus constantes críticas a Ortega, ha lamentado en su cuenta de Twitter los tristes incidentes que han marcado el funeral del poeta: “Siento mucha indignación por lo ocurrido hoy en la Catedral de Managua en las exequias del P. Ernesto Cardenal. Irrespeto total. De nuevo, las turbas de la dictadura muestran su fanatismo y su violencia. Mi solidaridad con personas y periodistas agredidos. ¡Basta de irracionalidad!”.
El día 1, tras conocer la noticia de su muerte, el auxiliar de Managua había despedido así quien tiene por maestro: “Adiós al amigo Ernesto Cardenal, quien ahora puede cantar su Salmo 15 delante de Dios: ‘No hay dicha fuera de ti. Yo no rindo culto a las estrellas de cine, ni a los líderes políticos, y no adoro dictadores‘”.

Críticas e incomprensiones

Como escritor, Cardenal deja una obra colosal (ha sido candidato en varias ocasiones al Nobel de Literatura), siendo un reflejo de su carácter apasionado el hecho de que no ha dejado de componer hasta que le ha alcanzado la muerte, publicando su última obra apenas unos meses atrás. Ese mismo genio es el que le ha acarreado numerosas críticas e incomprensiones… Incluso más allá de la muerte.

Vida Nueva