Saturday, November 28, 2009

Ana Cristina Villa Betancourt: “Los laicos somos la Iglesia en medio del mundo”


Responsable de la Sección ‘Mujer’ en el Pontificio Consejo para los Laicos
(Texto y fotos: Darío Menor- Roma) Desde esta primavera, la Sección ‘Mujer’ del Pontificio Consejo para los Laicos está dirigida por Ana Cristina Villa Betancourt, una colombiana joven, entusiasmada con su trabajo y miembro de la Fraternidad Mariana de la Reconciliación. Su departamento rumia las palabras del Papa referidas a la cuestión femenina, reflexiona acerca del papel de la mujer en la Iglesia y sirve de contacto con la Santa Sede para las asociaciones de laicas.

¿Cuáles son las principales labores de su departamento?
Trabajamos a dos niveles. El primero es la reflexión: impulsamos la meditación sobre el papel de la mujer dentro de la Iglesia y la sociedad, y le seguimos la pista a los que están comprometidos, sobre todo, al Santo Padre. En esta labor dialogamos con expertos de todos los campos. El otro nivel consiste en hacer de contacto con las asociaciones de mujeres católicas que existen dentro de la Iglesia; somos su punto de referencia en la Santa Sede y nos encontramos mucho con ellas, tanto aquí como en sus propias reuniones. También trabajamos en la crea­ción de una red de mujeres y de asociaciones de mujeres por medio del uso de las nuevas tecnologías.
¿Tienen los laicos suficiente representación en la Iglesia?
El Vaticano II ha aumentado la conciencia de la riqueza e identidad que tienen los laicos. Creo que, más que hablar de representación de los laicos, hay que subrayar que los laicos somos la Iglesia, somos parte de ella y miembros de pleno derecho. No obstante, todavía tenemos que seguir profundizando en la riqueza del Vaticano II. De ahí procede, precisamente, la idea de que la Iglesia somos todos los bautizados, aunque a veces se piensa que la Iglesia está formada solamente por el ministerio ordenado. Por el bautismo, participamos plenamente en la misión de la Iglesia. Obviamente, los sacerdotes desempeñan el importantísimo papel de presidir la comunidad eclesial, pero los laicos somos, al final, la Iglesia en medio del mundo.
¿Qué papel deben desempeñar las mujeres?
La cuestión de la mujer está muy unida a la de los laicos. Los templos están llenos de mujeres; muchas veces, el único hombre es el cura. Ellas están muy presentes en la Iglesia, pero hace falta más consciencia sobre la riqueza que representan. Ahí es clave una mayor formación. Las reivindicaciones del feminismo nos han hecho oponernos a los hombres o acentuar mucho una defensa de la mujer que nos lleva a igualarnos con ellos. En mi opinión, ambas posiciones son errores del feminismo. Lo interesante es la complementariedad de la diferencia: somos todos distintas expresiones de lo humano.
¿Y la mujer? ¿Tiene ella suficiente presencia en los órganos decisorios eclesiales?
Hay que entender la propia naturaleza de la Iglesia. Cuando el Papa viajó a Baviera en 2006 y le preguntaron sobre la mujer en la Iglesia, dio una respuesta muy interesante. Benedicto XVI reconoció entonces que a la Iglesia le es imposible dar la ordenación sacerdotal a las mujeres, ya que supondría ir en contra de la voluntad de Cristo. Otro punto claro es que la estructura de la Iglesia es jerárquica y las decisiones están asociadas al orden sagrado. El Papa dice que está seguro de que las mujeres, con sus propias capacidades, sabrán abrirse espacios. Esta apertura de espacios, en mi opinión, se da con mujeres que entiendan muy bien y amen mucho su propia identidad católica. Para eso, debemos ser mujeres formadas que nos esforcemos duro para trabajar con y junto a Pedro. Así lograremos más espacios. En la historia, las cosas se mueven despacio y la Iglesia ha demostrado que no sigue las modas del tiempo, sino que se deja llevar por donde Dios la va conduciendo.
Vida Nueva

1 comment:

Anonymous said...

Un buen editorial, la vimos por el canal EWtn.Orgullosa de que nos represente a los laicos comprometidos colombianos.Que Dios la bendiga.