Cuenta Laura Cornejo en elmundo.es que primero bautizó al niño de 8 años sin que la madre tuviese conocimiento ni diese el consentimiento para ello, y cuatro meses después y pese a saber que la progenitora no quería educar a su hijo en la fe católica, le dió la comunión, según informó la Cadena Ser.
La actuación de uno de los sacerdotes de la iglesia de San Andrés (Valladolid),al que los feligreses conocen como "el cura joven", ha indignado a Loreto V.L, la madre del pequeño ya bautizado y comulgado, y el Arzobispado de Valladolid le da la razón, si bien no evitó que el sacerdote reincidiese en la administración de un sacramento a al menor.
Loreto, separada del padre del pequeño desde antes de su nacimiento y divorciada en 2005, no da crédito a lo sucedido. Aunque es ella quien tiene la custodia del niño, con el que vive en Málaga, supo por boca de su hijo que el pasado miércoles de ceniza le habían bautizado en la Parroquia de San Andrés.
El niño pasó las vacaciones de Semana Santa con su padre, con el que la madre no mantiene ningún tipo de relación desde hace años. "Fui a recogerle a Valladolid un domingo, y no pude ir a hablar con el cura, pero al día siguiente me puse en contacto con el Arzobispado para pedir explicaciones". Un precepto eclesiástico considera a los niños "infantes" a partir de los ocho años, y basta con el consentimiento de un progenitor y el asentimiento del menor para proceder a su bautismo.
El niño le dijo a su madre que se había querido bautizar porque de otra forma "no podía ser cofrade". El sacerdote sólo pudo decirle "que al niño le hacía mucha ilusión". Ya en ese momento el Arzobispado se disculpó con Loreto y le dio la razón por entender que la madre debía haber sido informada.
En agosto, cuando el niño regresa de pasar las vacaciones de verano con su padre, Loreto le pregunta en broma si ha hecho ya la comunión. "Y me responde que sí. ¿Y los tres años de catequesis obligatoria cuándo los ha hecho?" se preguntó. Ese día Loreto acude al Arzobispado y a la parroquia. Desde el arzobispado, se le vuelve a dar la razón, y el sacerdote vuelve a decirle "que al niño le hacía mucha ilusión hacer la Comunión".
Pero no hay vuelta atrás, desde el Arzobispado indicaron que los sacramentos no se pueden "deshacer" y que la única opción es que una vez que el niño sea mayor de edad apostate. Además, señalaron que no se ha tomado ningún tipo de represalia contra el sacerdote, "aunque se ha hablado con él".
El traslado del cura a otra parroquia, el pasado 4 de octubre no tiene nada que ver con lo ocurrido y que su cambio se debe a "necesidades de la diócesis" y que estaba previsto "desde hace tiempo".
Religión Digital
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1 comment:
Me parece muy bien que le hayan dado la comunión y le hayan bautizado. Yo progenitora lleve a bautizar a mi hija de dos años de escondidas de su padre, que estupidamente no queria que fuera bautizada. Pense, yo voy a darle a mi hija lo mismo que mis padres me dieron a mi, pero mucho más si puedo, asi que la bautice y años después ya divorciada de su padre, hizo la primera comunión con asistencia del mismo, que nunca se preguntó como podía haber hecho la comunión si no estaba bautizada, razón por la cual considero que fue estupidez aquella negativa y ningún progenitor que quiere bautizar a sus hijos, puede hacer caso del progenitor que no lo desee la mayor parte de los casos es una rebeldia estupida e infan til que no tiene argumentos solidos para negarle a los hijos un bautismo que ellos mismos recibieron.
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