Tuesday, April 10, 2012

La asociación de sacerdotes irlandeses «molesta» por el silencio impuesto a uno de sus fundadores

La Congregación para la Doctrina de la Fe está preocupada por los escritos de un conocido sacerdote irlandés, el padre Tony Flannery, sobre varios temas sensibles

GERARD O’CONNELL
ROMA

La Asociación de Sacerdotes Irlandeses (ACP) —que representa a alrededor de un tercio de los sacerdotes de Irlanda— dice que está «molesta» por el silencio impuesto al padre Tony Flannery, uno de sus miembros fundadores.

La ACP publicó un comunicado de prensa en la tarde del lunes de Pascua, 9 de abril, en el que expresó su «extrema inquietud y malestar» por esta situación. Su declaración llegó después de que varios medios irlandeses, incluidos The Irish Catholic (5 de abril) y The Irish Times (9 de abril), informaran que el Vaticano había impuesto silencio.

Si bien el comunicado de la ACP dio algunos detalles sobre lo que realmente había sucedido, Vatican Insider se enteró por fuentes informadas que, a mediados de marzo, el padre Flannery (65 años), miembro de la Congregación del Santísimo Redentor —cuyos miembros son popularmente conocidos como «los redentoristas»— había sido convocado a Roma para una reunión con su superior general, el padre Michael Brehl.

Esto sucedió aproximadamente una semana antes de que el Vaticano publicara el resumen de los resultados de la visita apostólica a la Iglesia irlandesa ordenada por el Papa Benedicto XVI luego del escándalo del abuso sexual de menores por parte de sacerdotes.

En Roma, el padre Flannery se enteró de que el padre Brehl, su superior general canadiense, había sido convocado previamente a la Congregación para la Doctrina de la Fe (CDF), donde, de acuerdo con las fuentes, su prefecto, el cardenal William Levada, le había informado que la CDF estaba preocupada por la «ortodoxia» de ciertos puntos de vista expresados por el padre Flannery en artículos que había escrito para la revista Reality. La revista mensual la publican los redentoristas irlandeses, y tiene una tirada de alrededor de 6500 ejemplares.

En particular, a la CDF le preocupaba la ortodoxia de lo que el padre Flannery había escrito con respecto a la contracepción, a la posibilidad de sacerdotes casados en Irlanda y a la ordenación de mujeres como sacerdotes. La CDF también parece tener problemas con la función del padre Flannery como líder de la Asociación de Sacerdotes Irlandeses —que hoy tiene como miembros a 820 de los 3400 sacerdotes irlandeses—, y quisiera que se apartara del cargo.

Algunas fuentes dicen que el superior general le dijo al padre Flannery que no puede escribir ni hablar sobre ninguno de los temas anteriormente mencionados. Además, le ha pedido al sacerdote irlandés que se retire a un monasterio durante alrededor de seis semanas para orar y reflexionar sobre todo esto. Al cabo de ese período, el superior general espera que el padre Flannery regrese «para pensar con la Iglesia» (Sentire cum Ecclesia).

Vatican Insider también se ha enterado de que el editor de la revista Reality, el padre Gerard Moloney, sacerdote redentorista también él, recibió instrucciones de no escribir sobre los temas anteriormente mencionados. Además, de ahora en adelante, la revista Reality deberá ser supervisada por un teólogo antes de su publicación.

El cardenal Levada quiere que el superior general de los redentoristas le envíe informes a fines de julio para asegurarle que la situación del padre Flannery se haya resuelto.

Vatican Insider ha intentado contactar con el superior general para oír sus comentarios sobre este asunto, pero el padre Brehl ya se había ido de Roma, y no logramos contactarlo a tiempo para la redacción de este artículo.

Por otro lado, la ACP en su declaración comentó sobre lo sucedido. Dijo que «un abordaje de este tipo, concentrándose individualmente sobre el padre Flannery e, inevitablemente, por implicación, sobre los miembros de la asociación, es una intervención extremadamente desacertada en el contexto pastoral actual en Irlanda».

La ACP afirmó «en los términos más contundentes posibles» su «confianza y solidaridad para con el padre Flannery» y afirmó claramente que cree que «esta intervención es injusta, injustificada e imprudente».

Dijo que los problemas que han sido planteados por la asociación desde su fundación hace menos de dos años, y por el padre Flannery como parte del equipo de liderazgo, «no son un ataque ni un rechazo hacia las enseñanzas fundamentales de la Iglesia. En cambio, son una importante reflexión por parte de una asociación de más de 800 sacerdotes irlandeses —quienes han prestado servicio durante mucho tiempo a la Iglesia católica en Irlanda— sobre problemas que afloran en las parroquias de todo el país».

La ACP rechazó la descripción que de ella hicieron «algunos grupos reaccionarios marginales» como «un pequeño círculo de sacerdotes con una agenda radical» y dijo que ha «protestado con vehemencia contra este injusto retrato».

«Estamos y deseamos seguir estando en el corazón de la Iglesia, comprometidos con poner en acto las reformas del Concilio Vaticano II», afirmó la asociación.


En este contexto, dijo, «queremos hacer manifiesta nuestra extrema inquietud y malestar por la situación actual, y no menos por el secreto que rodea tales intervenciones y las cuestiones sobre los procesos debidos y la libertad de conciencia que tales intervenciones hacen aflorar».

La ACP dice que cree que en esta coyuntura crítica en la historia «esta forma de intervención —lo que el arzobispo Martin llamó recientemente “caza a la herejía”— no sirve de nada a la Iglesia católica de Irlanda y podría tener el efecto no buscado de exacerbar una percepción creciente de una significativa “desconexión” entre la Iglesia irlandesa y Roma».

Una fuente le dijo a Vatican Insider que la declaración de la ACP solo citó una parte del comentario del arzobispo Martin. En realidad, él dijo: «No estoy diciendo que estemos yendo a la caza de la herejía, pero lo que sí deberíamos hacer es continuar con un diálogo con la comunidad teológica, afilando la reflexión en áreas que en realidad van más allá de lo que es aceptable en el ámbito de la teología católica».

Estas observaciones del arzobispo del 20 de marzo respondían al pedido de un comentario con respecto al resumen de los resultados de la visita apostólica a la Iglesia irlandesa, que afirman que hoy en Irlanda existe «una cierta tendencia, no dominante, pero, de todos modos, bastante extendida, entre los sacerdotes, los religiosos y los laicos, de sostener opiniones teológicas que discrepan con las enseñanzas del Magisterio».

Parecería ser que el desafío de Roma con respecto al padre Flannery debería ser visto en este contexto más amplio.


Vatican insider

No comments: