Durante la Audiencia de los miércoles, Francisco recordó el gran corazón de los brasileños, la experiencia de la JMJ de Río, a la Virgen de Aparecida y lanzó palabras de esperanza: «Acogida, fiesta y misión»
MICHELANGELO NASCAROMA
Multitud de fieles y largas colas esta mañana en la Plaza San Pedro para participar en la décimo quinta audiencia general del Papa Francisco (cita que volvió a comenzar hoy después de la pausa estiva). La majestuosa columnata del Bernini estaba llena de peregrinos que se reunieron en la cita semanal que (vale la pena recordarlo) cada vez registra la presencia de muchisimas personas. Hoy eran 50 mil peregrinos de todo el mundo.
Después de la acostumbrada vuelta en el papamóvil –que para el Pontífice es de enorme importancia porque de esa manera puede entrar en contacto con los fieles– y del anuncio en las diferentes lenguas del Evangelio, Papa Francisco se dirigió a los fieles recordando las espléndidas experiencias de los días que pasó en Brasil, en ocasión de la JMJ. La visita al Santurario de Aparecida, la vigilia en la playa de Copacabana y la celebración eucarística final, los jóvenes y la disponibilidad del pueblo brasileño en el servicio y en la acogida. Recuerdos que quedaron impresos en el alma del primer Papa latinoamericano de la historia. «¡Muy buena gente los brasileños! ¡De verdad tienen un corazón enorme!», afirmó el Papa entre los aplausos de los presentes. Con esta expresión, Francisco quiso agradecer al pueblo de Río de Janeiro por la capacidad para saber acoger a los millones de jóvenes que, a ojo de buen cubero, llenaron la famosa playa brasileña superando cualquier expectativa. El Pontífice argentino resumió después el sentido de aquel viaje con tres palabras clave: acogida, fiesta y misión: «La buena noticia no sale en los periódicos ni en la tele», y, sobre todo, «los chicos buenos no acaban en los periódicos porque no llevan a cabo actos violentos, no hacen escándalos, por lo que no son noticia». «Ustedes, queridos jóvenes, deben transformarse en esperanza para el mundo, abrir las puertas hacia un mundo nuevo de esperanza, esta es su tarea». El Papa Francisco se dirigió de esta manera a los jóvenes, e insistió en que deben tener «la valentía para aceptar este desafío» y para «transformar el mundo».
Después, Bergoglio no dejó pasar la ocasión para recordar a las Iglesias del Medio Oriente, tan afectadas por la violencia y las consecuencias de la guerra. Pidió ofrecer testimonio del Evangelio de Cristo que es consuelo y signo de misericordia, sobre todo para los que están afligidos por el dolor. Culminando su audiencia general, el Santo Padre renovó su apremiante llamamiento en favor de la paz y su invitación a participar en la jornada de ayuno y de oración por la paz en Siria, en Oriente Medio y en el mundo entero. En particular, dirigiéndose a los fieles de lengua árabe, especialmente a los provenientes de Irak, Jordania y Egipto, el Papa alentó a «unirse siempre a Cristo, edificando su Reino con la fraternidad, el compartir y las obras de misericordia». «¡La fe es una fuerza poderosa capaz de hacer que el mundo sea más justo y más bello!», exclamó el Obispo de Roma y alentó a ser «una presencia de la misericordia de Dios y a testimoniar al mundo que las tribulaciones, las pruebas, las dificultades, la violencia y el mal no podrán derrotar nunca a Aquel que derrotó la muerte: Jesucristo».
La popularidad de Francisco aumenta a pasos agigantados, como se puede ver en las cuentas de Twitter del Papa (@Pontifex) en las diferentes lenguas, que ya han superado los nueve millones de seguidores a tan solo nueve meses de su apertura. La mayor parte de los seguidores es de lengua española (más de 3 millones 600 mil), después siguen los angloparlantes (con 2 millones 920 mil), los italianos (1 millón 53 mil), los lusitanos de Europa y América (con 738 mil seguidores), los francófonos (con 186 mil), los cultos lectores de la lengua de Virgilio (159 mil), los alemanes (138 mil) los polacos (121 mil) y los árabes (86 mil).
«¡Que se eleve fuerte en toda la tierra el grito de la paz!», exclamó Francisco nuevamente al final de la Audiencia general en la Plaza San Pedro. Y recordó que «El próximo sábado viviremos juntos una jornada especial de ayuno y de oración por la paz en Siria, en Oriente Medio y en el mundo entero. También por la paz en nuestros corazones. Porque la paz empieza en el corazón. Renuevo mi invitación a toda la Iglesia a vivir intensamente este día, y, desde ahora, expreso mi gratitud a todos los hermanos cristianos, a todos los hermanos de otras religiones y a los hombres y mujeres de buena voluntad que se quieran unir, en los propios lugares y modos, a este momento».
Vatican Insider
El Papa explica en la Audiencia general principales ideas de la JMJ Río de Janeiro
4 de septiembre, 2013. (Romereports.com) (-SÓLO VÍDEO-) El Papa Francisco retomó las audiencias generales de los miércoles en la plaza de San Pedro. A esta primera convocatoria de septiembre acudieron más de50.000 peregrinos.
El Papa recordó los principales momentos de su visita a Brasil durante el verano y pidió a los jóvenes que se atrevan a transformar el mundo, a hacerlo más justo y hermoso.
RESUMEN DE LA CATEQUESIS DEL PAPA EN ESPAÑOL:
Queridos hermanos y hermanas:
Aunque ya ha pasado más de un mes, quisiera recordar en la catequesis de hoy la Jornada Mundial de la Juventud de Río de Janeiro. En primer lugar, doy gracias a Dios y a Nuestra Señora de la Aparecida por las gracias alcanzadas.
También quiero agradecer a los brasileños, a sus autoridades, a sus parroquias y a las familias, su fraternal acogida. Para resumir esta experiencia, les propongo tres palabras: La primera es acogida, que crea vínculos de amistad, que perduran sobre todo en la oración. La segunda es fiesta, fiesta con los hermanos, pero, sobre todo, fiesta con el Señor: Juntos hemos rezado, adorado; ha sido una fiesta de la fe. Y, finalmente la tercera: misión. Jesús envía a los discípulos: «Vayan», salgan de ustedes mismos, y lleven la luz y el amor a las periferias de la existencia. Y añade: «Yo estaré con ustedes». Sin Él no podemos hacer nada; con Él, cualquier joven puede ser una esperanza para Dios, y para los demás: ¿Quieren ser esa esperanza? ¿Se atreven a transformar el mundo, a hacerlo más justo y más hermoso? La Jornada Mundial de la Juventud nos recuerda la gran noticia de la historia: que somos amados por Dios y Jesús ha venido a salvarnos.
Saludo cordialmente a los peregrinos de lengua española, en particular al grupo de oficiales venidos desde Colombia, así como a los fieles provenientes de España, Argentina, México y los demás países latinoamericanos. Invito a todos a que la acogida, la fiesta y la misión vividas en Brasil no sean un mero recuerdo, sino el alma de nuestras vidas y comunidades. Gracias.
El Papa Francisco renueva invitación a unirse a vigilia por la paz
4 de septiembre, 2013. (Romereports.com) El Papa Francisco continúa reclamando con fuerza e insistencia la paz. Durante la primera audiencia general tras las vacaciones invitó a todos a participar en la vigilia de ayuno y oración por la paz que ha convocado en la plaza de San Pedro para el sábado 7 de septiembre.
PAPA FRANCISCO
“El sábado próximo viviremos juntos una especial jornada de ayuno y de oración por la paz en Siria, en Oriente Medio y en el mundo entero. También por la paz en nuestros corazones, porque la paz comienza en el corazón. Invito de nuevo a toda la Iglesia a vivir con intensidad este día y, desde ahora, manifiesto mi reconocimiento a los demás hermanos cristianos, a los hermanos de otras religiones y a los hombres de buena voluntad que querrán unirse, en el lugar y del modo oportuno, a este momento”.
El Papa tuvo también un recuerdo especial para los jóvenes y agradeció la experiencia vivida en Brasil durante la JMJ del pasado mes de julio.
PAPA FRANCISCO
“Sin Él no podemos hacer nada; con Él, cualquier joven puede ser una esperanza para Dios, y para los demás: ¿Quieren ser esa esperanza? ¿Se atreven a transformar el mundo, a hacerlo más justo y más hermoso? La Jornada Mundial de la Juventud nos recuerda la gran noticia de la historia: que somos amados por Dios y Jesús ha venido a salvarnos”.
Antes de la audiencia el Papa retomó el contacto con los peregrinos en la plaza de San Pedro. En su largo paseo con el papamóvil saludó a decenas de niños y a muchos enfermos.En la plaza había más de 50.000 personas.
Para las 14 audiencias generales celebradas hasta ahora por el Papa Francisco el Vaticano ha repartido 825.000 invitaciones y a ellas hay que sumar el número de turistas que acuden sin reservar entrada. Según estos datos, el Papa Francisco triplica las cifras del inicio de los pontificados de Juan Pablo II y Benedicto XVI.
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