«Una blasfemia y una ofensa a los que creen»

La Conferencia episcopal arremete contra los buses ateos por ofensivos

"Una blasfemia y una ofensa a los que creen". Así de tajante se muestra el episcopado español, a la hora de descalificar la campaña publicitaria de los autobuses ateos. Primero, porque, a su juicio, se trata de "una publicidad lesiva de la libertad religiosa". Entre otras cosas, porque se realiza desde los autobuses públicos. Y como explican los obispos, "la libertad de expresión es un derecho fundamental", pero los espacios públicos"no deben ser empleados para publicitar mensajes que ofenden las convicciones religiosas de muchos".

Y cuando, se hace, como en este caso, "se lesiona el derecho al ejercicio libre de la religión, que debe ser posible sinq ue nadie se vea necesariamente menospreciado o atacado".

Pero hay más. Según la Iglesia, "insinuar que Dios probablemente sea una invención de los creyentes y afirmar además que no les deja vivir en paz ni disfrutar de la vida, es objetivamente una blasfemia y una ofensa a los que creen” .

De ahí que los prelados pidan a las "autoridades competentes" que tutelen "el ejercicio pleno del derecho a la libertad religiosa". Algo que, según los obispos, "es posible hacerlo compaginándolo al mismo tiempo con el amparo y la promoción de la libertad de expresión de todos". Y ponen como ejemplo, el proceder de los alcaldes de Roma, Milán o Zaragoza, que han prohibido la circulación de los autobuses ateos.

En cualquier caso, la Conferencia episcopal concluye invitando a los católicos a "respetar el derecho de todos a expresarse" y a actuar "con serenidad y mansedumbre ante las injurias", asi como "con fortaleza y valentía en el amor y la defensa de la verdad. Dios es amor".

Por José Manuel Vidal
RD
Viernes, 23 de enero 2009