ZAPATOS
“Los zapatos son el espejo del alma”, rezaba un anuncio de calzado. Podemos comprobar si está frase es cierta analizando la foto.
Zapatos rojos. Se trata probablemente de una persona con fuerte personalidad, que se afirma por su condición de saberse única.
Zapatos impecables. Hablan de una persona de orden, que le da importancia al aspecto exterior, pero con un punto de austeridad, sin excesos.
Zapatos lisos. Son los zapatos ideales para mostrar el personaje, escondiendo la persona, no hay engaños ni subterfugios, pero tampoco concesiones.
Yo preferiría pensar que son los ojos, y no los zapatos, el espejo del alma; pero no está de más, de vez en cuando, echar una mirada también a los zapatos.
Pastotalsj
Jesuitas de Castilla
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