Wednesday, February 24, 2016

Celam: ‘Nuestra preocupación por el Acuerdo de Asociación Transpacífico – TPP’




Nosotros, obispos de América Latina y El Caribe, nos dirigimos a la sociedad civil, los gobiernos del Continente y la opinión pública en general, con la esperanza de poder unir nuestros corazones y nuestras voces ante una situación de alcance global que nos invita a ratificar, a través de la acción, la prelación por la vida que es sagrada y la dignidad de la persona humana por encima de los intereses del lucro y el comercio.

Se trata de nuestra preocupación por el Acuerdo de Asociación Transpacífico(TPP, por sus iniciales en inglés), tratado que reúne a las naciones de Australia, Brunei, Canadá, Chile, Estados Unidos, Japón, Malasia, México, Nueva Zelanda, Perú, Singapur y Vietnam, entre otras naciones, cuyas negociaciones se cerraron el 05 de octubre de 2015, cuyos textos completos sólo fueron conocidos por la población mundial hasta el 05 de noviembre pasado.
A pesar de ser un acuerdo comercial, sus alcances afectan profundamente áreas sociales sensibles como la salud, la educación y el medio ambiente, especialmente de las poblaciones más pobres y vulnerables de la región.
En lo que se refiere al derecho fundamental a la salud, las disposiciones de este tratado en materia de propiedad intelectual constituyen una normativa de carácter supranacional que, en caso de ser aprobada por los Congresos de los países firmantes, se traducirán en la máxima ampliación y fortalecimiento de las condiciones de monopolio farmacéutico.
Como consequencia inevitable, se alejará la posibilidad de que lleguen al mercado versiones de medicamentos genéricos de calidad y asequibles en México, Perú, Chile y hasta Estados Unidos, lo que traerá dolor, sufrimiento y miles de muertes en nuestra región, todo lo cual puede evitarse aún.
Es irremediable preguntarnos ¿qué motivación puede estar detrás de estas negociaciones que ponen en riesgo la integridad y dignidad de los seres humanos? El resultado directo de la expansión del monopolio farmacéutico es el lucro exorbitante a expensas de la paz, la salud y la alegría de millones de personas, muchas de ellos ya en condiciones de vulnerabilidad.
Si el efecto de las disposiciones en propiedad intelectual va en dirección distinta al bienestar de la humanidad, ¿estamos llamados a aceptarlas? El Papa Francisco en su Exhortación ApostólicaEvangelli Gaudium nos señala claramente el camino: "Así como el mandamiento de 'no matar' pone un límite claro para asegurar el valor de la vida humana, hoy tenemos que decir 'no a una economía de la exclusión y la inequidad'. Esa economía mata" (EG, 53).
Como hermanos reunidos en Cristo estamos llamados a reivindicar la fraternidad, el amor y la compasión. Vemos en el proceso de aprobación o rechazo del TPP al interior de los Congresos de los países la oportunidad que nos plantea la vida para que, una vez más, los seres humanos y nosotros, al interior de la Iglesia Católica, nos unamos para honrar y proteger lo sagrado.
Atentamente,

Gustavo Rodríguez Vega, Arzobispo de Yucatán (México).
Walter Heras Segarra, OFM, Obispo de Zamora (Ecuador).
Pedro Ossandón Buljevic, Obispo Auxiliar de Santiago (Chile).
Guido Charbonneau, PME, Obispo de Choluteca (Honduras).
José Luis Azuaje, Obispo de Barinas (Venezuela).
Pedro Barreto Jimeno, SJ, Arzobispo de Huancayo (Perú),
José Daniel Falla, Obispo Auxiliar de Cali (Colombia).
Guilherme Werlang, Obispo de Ipameri (Brasil).
Jorge Lozano, Obispo de Gualeguaychú (Argentina).
José Carmelo Martínez Lázaro, OAR, Obispo de Cajamarca (Perú).
Carlos Enrique Herrera Gutiérrez, OFM, Obispo de Jinotega (Nicaragua).


ADITAL/CELAM

No comments: