A medida que entramos en la Cuaresma podemos preguntarnos si el ayuno tiene algún sentido para nosotros hoy día. Tiene. Se trata de preguntarnos qué relación tenemos con nuestro alimento y nuestra bebida. Jesús amaba comer con sus amigos. El alimento era importante para Él.
Para las familias, las cenas son momentos en que los niños observan y escuchan a sus padres, y vice versa. Pero las cenas familiares están en peligro de desaparecer, con la comida rápida, la atracción de la televisión (la que muchas veces se deja encendida mientras se está en la mesa). Igual que los teléfonos celulares, reducen la mutua presencia en nuestras reuniones. Para nuestras familias, una buena Cuaresma sería tener comidas familiares por lo menos una vez por semana, y llevarlas adelante decididos a escuchar, a sentarnos en paz, a saber cómo están todos, y disfrutando de la "comida lenta".
Para las familias, las cenas son momentos en que los niños observan y escuchan a sus padres, y vice versa. Pero las cenas familiares están en peligro de desaparecer, con la comida rápida, la atracción de la televisión (la que muchas veces se deja encendida mientras se está en la mesa). Igual que los teléfonos celulares, reducen la mutua presencia en nuestras reuniones. Para nuestras familias, una buena Cuaresma sería tener comidas familiares por lo menos una vez por semana, y llevarlas adelante decididos a escuchar, a sentarnos en paz, a saber cómo están todos, y disfrutando de la "comida lenta".
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