Advierte a los obispos que ni sociedad ni Gobierno aceptan "tutelas morales"Tras la escalada de tensión entre el Gobierno y la Iglesia Católica, la vicepresidenta primera del Ejecutivo, María Teresa Fernández de la Vega, ha intentado en el Congreso poner los puntos sobre las íes. Y ha lanzado un claro aviso a los obispos: el Gobierno no está dispuesto a aceptar tutelas morales.
La vicepresidenta De la Vega, que no había respondido hasta el momento a la protesta organizada por la Iglesia, ha afirmado que respeta la "expresión de opiniones" y el "derecho a crítica", pero que no es "tolerable" que parte de la jerarquía eclesiástica "vulenere el respeto debido al Gobierno y el Parlamento" y "falte a la verdad".
Los arzobispos de Madrid, Antonio María Rouco Varela, y de Valencia, Agustín García-Gasco, fueron los más beligerantes contra el Ejecutivo que dirige José Luis Rodríguez Zapatero hasta el extremo de afirmar que medidas como la reforma del divorcio o los matrimonios de homosexuales suponían un retroceso de los derechos humanos y la democracia.
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