Estamos en la semana de la oración para la unidad de los cristianos. Jesús llamó a su mensaje como la Buena Nueva, y así es, una forma de vivir que celebra la vida y entrega un sentido al sufrimiento y a la muerte. Si existe un mejor sentido, por favor háganmelo saber. El mensaje es simple, pero se ha complicado por la multiplicidad de religiones e iglesias. Recordamos al oración de Jesús: "Que seamos uno", incluyendo musulmanes, judíos y todos los cristianos. Es un camino largo y lento hacia la unidad, y privilegiando lo que nos une, hará más rápida la jornada. Los hombres fabrican las divisiones, Cristo las une. La verdadera historia de la Iglesia no está en sus instituciones y doctrinas, en los concilios, reformas y sectas. La verdadera historia está en los creyentes que oran a Dios Padre a través de la mediación de Cristo su Hijo. Donde dos o tres o miles se reúnen en Su Nombre, Él estará con ellos.
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