Recita pasajes de la Biblia con sólo apretar un botón en su espalda
Cuenta La Opinón que el muñeco de Jesús que recita fragmentos de la Biblia está causando tanto furor como polémica. Después de unos cuantos episodios controvertidos, el artículo por fin ha llegado a los Wal-Mart, el `paraíso´ del consumismo estadounidense. Antes de eso, el producto tuvo que salvar diversos escollos: así, hace escasas semanas volvió a ser incluido entre los juguetes que regala una organización benéfica en los EEUU, que antes lo había rechazado por considerar que podía ofender a judíos y musulmanes.
Bajo el nombre de `Toys for Tots´, este programa benéfico estadounidense acepta cada año donaciones de juguetes nuevos que destina a niños con pocos recursos económicos para facilitar la labor de Santa Claus, Papá Noel o Los Reyes Magos. Se trata de un programa de donaciones aconfesional que gestiona la organización de Infantes de Marina Retirados.
Hace menos de un mes, la organización rechazó una donación en Los Ángeles de 4.000 figuras de Jesucristo de 30 centímetros de altura que emiten una grabación con fragmentos de la Biblia por considerar que podían ser ofensivas para familias judías o musulmanas.
La decisión indignó tanto a grupos cristianos como seculares. "Todo lo que estábamos tratando de hacer era donar juguetes a una organización que hace un gran trabajo distribuyéndolos a los niños necesitados en Navidad", dijo en un comunicado David Socha, fundador de one2believe, la empresa que comercializa los muñecos. Sin embargo, la fundación cambió de opinión y según indica en su página de Internet, www.toysfortots.org, "el tema ha sido resuelto".
"Hemos encontrado el lugar adecuado para estos objetos y así se lo hemos comunicado al encargado de la donación", indica la misma información sin dar más detalles.
La compañía donante es one2believe, con oficina en Beverly Hills y conocida por la fabricación de diversas figuras bíblicas. La firma también vende muñecos de otros personajes bíblicos, como Moisés y David. El muñeco de Moisés puede recitar los Diez Mandamientos, mientras las otras figuras pueden decir versículos de la Biblia con sólo apretar un botón.
La historia de los juguetes muestra cómo los sectores cristianos están cada vez más comprometidos con el merchandising: después de movilizar a los fieles y captar nuevos adeptos a través del séptimo arte (con películas como `Un puente para Terabithia´ o la primera parte de `Las crónicas de Narnia´, ambas proyectos de una productora de cine cristiano).
Fuente: El periodista Digital
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