La segunda intervención de este primer día de la Semana Teológica Pastoral estuvo a cargo del decano de la Facultad de Sociología de la Universidad Católica, Pedro Morandé, quien abordó al capítulo “Mirada de los discípulos misioneros sobre al realidad”, del Documento Final de la V Conferencia.
Esta mirada se dirige, en primer lugar, hacia el exterior de la Iglesia, y aborda las situaciones socio-cultural, económica, socio política, la biodiversidad y ecología y la presencia de los pueblos indígenas y afrodescendientes en la Iglesia.
El profesor Morandé se refirió a los cambios culturales que se producen en el mundo, los que “afectan todos los ámbitos de la vida social, no sólo la economía, sino que la cultura, la política, la ciencia, la educación, el deporte, las artes y también la religión”. Agregó que el punto central abordado por los obispos en este aspecto es cómo afectan estos cambios a la vida y experiencia religiosas, especialmente en cuanto a la acción de los medios de comunicación, que entregan una visión fragmentada de la realidad que la hace opaca. Ante esta fragmentación de la realidad, lo que le da sentido unitario es la cultura, las tradiciones culturales, dijo Morandé, especialmente la religiosidad popular y la tradición mariana en la región.
Al respecto, recordó lo señalado por el Papa en Valencia, en el Encuentro Mundial de las Familia, done se refirió a la transmisión de la fe de padres a hijos, frente a medios de comunicación que operan como si Dios no existiera, que “deforman la realidad, con o sin intención, ponen entre paréntesis, como si no hubiese esta presencia misteriosa de Dios detrás de toda la realidad”.
Y si Dios no existe, para esta mirada son los bienes de consumo que cada uno puede adquirir los que dan la felicidad. Frente a esto, los obispos proponen “recomenzar desde Cristo, sabiduría de Dios”.
Las luces y las sombras
Al abordar la segunda parte de este capítulo, referida a la situación interna de la Iglesia, el profesor Morandé destacó lo señalado por los obispos acerca de la “influencia benéfica de la Iglesia sobre al sociedad en su conjunto y sobre el tema de la reconciliación entre los pueblos”.
Respecto de las luces, el documento señala el aumento del conocimiento de la Palabra de Dios, la renovación litúrgica, el amplio reconocimiento del pueblo por sus sacerdotes, diáconos permanentes y misioneros, la Doctrina Social, la diversificación de la organización de la Iglesia y la renovación pastoral en las parroquias, donde se reconoce ampliamente el carisma de los movimientos y nuevas comunidades, además de las comunidades eclesiales de base.
En cuanto a las sombras que ven los obispos “ad intra”, Pedro Morandé mencionó que el crecimiento porcentual de la Iglesia no va a la par con el crecimiento poblacional y recordó lo señalado por el Papa en Brasil en el sentido de que existe un “debilitamiento de la vida cristiana en su conjunto”.
Al respecto dijo que entre los motivos de ese debilitamiento “se mencionan influencias secularizadoras y regresiones hacia pastorales preconciliares. Pero, desde mi punto de vista, el debilitamiento mayor es la dificultad de transmitir la fe de una generación a la otra”.
La Semana Teológico-Pastoral del Clero de Santiago, continuará este miércoles con la exposición del Vicario de la Zona Cordillera, Padre Fernando Vives, SS.CC, acerca el “La Comunión de los Discípulos Misioneros en la Iglesia”, y un trabajo en comisiones.
fuente: Iglesia.cl
No comments:
Post a Comment