La Plata, Argentina (Patricio Downes, RD).- El arzobispo de la capital de Buenos Aires, Héctor Aguer, dijo que este año notó una gran ansiedad entre los jóvenes; me refiero al drama de jóvenes que no encuentran trabajo", en la celebración y peregrinación a San Cayetano a quienes los fieles le ruegan cada 7 de agosto. La ceremonia del ruego por paz, pan y trabajo se repite el 7 de cada mes, durante todo el año, en el templo de San Cayetano de Liniers en la ciudad de Buenos Aires, y en otros 42 templos argentinos dedicados a esta devoción. "El drama de los jóvenes que no encuentran trabajo, es algo que los sacerdotes comprobamos a cada paso en nuestro trato pastoral”, dijo el arzobispo en su reflexión semana durante el programa televisivo "Claves para un Mundo Mejor".
Luego de observar que "multitudes de personas que han ido a pedir trabajo, o a dar gracias por tenerlo" -este viernes, en San Cayetano- sostuvo que "éste es un fenómeno que ya se ha convertido en un elemento clave de la vida social argentina” por lo cual prácticamente “para nosotros el 7 de agosto es el Día del Trabajo". El programa "Claves..." es dirigido por el periodista Tito Garabal, por el Canal 2 América de Argentina.
"Coincido con ciertas mediciones que se ha hecho recientemente a propósito del desempleo y de cómo este hecho terrible ha crecido últimamente en la Argentina", dijo el arozobispo de la provincia más grande del país. Coincidió así con el informe de la Universidad Católica Argentina (UCA) y el presidente de la Pastoral Social del Episcopado, Jorge Casaretto, quien ubicó el índice de pobreza en un 40 %.
Luego, el Papa Benedicto XVI invitó la semana pasada a reducir en Argentina "el escándalo de la pobreza" en un país rico en alimentos y otros recursos. El gobierno del matrimonio Kirchner reaccionó con cautela y sus voceros sostuvieron que tenían "atoridad moral" porque durante las gestiones de Néstor Kirchner y de su esposa Cristina, desde 2003, la pobreza había bajada. Pero el Papa obtuvo un "milagro" inesperado, porque el propio Néstor Kirchner admitió que los índices de pobreza se ubican en el "20, 21 o 23 por ciento", cuando el INDEC, manejado por un hombre suyo, el secretario de Comercio, Guillermo Moreno, asegura que está clavada en un 15 %.
"¿Qué futuro nos espera entonces? Ante un problema como éste, no basta criticar, no basta quejarse, sino que es necesario que todos advirtamos que una responsabilidad ética se está poniendo en juego; todos tenemos que hacer algo para que esto pueda mejorar, para no privar de un horizonte de esperanza a nuestra juventud. Entre tanto, me parece bien que sigamos rezándole a San Cayetano", dijo ahora Aguer.
El prelado platense afirmó que "cuando hablamos del desempleo de los jóvenes tenemos que pensar en el futuro de nuestra sociedad. Una sociedad en la cual los muchachos y las chicas que están en condiciones de integrarse al mercado laboral, para colaborar en todos los órdenes, desde los más altos de la vida profesional hasta los servicios más sencillos y quedan frustrados en sus propósitos, exhibe una señal peligrosa de declinación". Y dijo que "para la Doctrina Social de la Iglesia el punto clave es el trabajo. Así es como nuestra doctrina sostiene que el trabajo es un deber, pero al mismo tiempo es también un derecho".
Monseñor Héctor Aguer también explicó que recibe constantemente pedidos de trabajo de jóvenes, muchos "de profesionales jóvenes, incluso con muy buena cualificación, que tendrían que ser requeridos y solicitados lo cual señala que hay un problema muy serio en la economía. Sé que no es un problema exclusivo de la Argentina sino, en cierto modo, un problema global. Pero tantas veces, se comenta o se critica sobre la cuestión económica en general o en otras variables, cuando me parece que habría que poner el acento en este punto clave".
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