El Vaticano desmiente que estudie que los hijos de los curas lleven sus apellidos

El portavoz de la Santa Sede considera "sin fundamento" las informaciones del diario ’La Stampa’

Lunes 3 de agosto de 2009.


Fuente: El Periódico

El Vaticano estudia que los hijos de los curas puedan heredar

EFE-CIUDAD DEL VATICANO El Vaticano ha desmentido hoy que esté estudiando medidas para que los hijos de los sacerdotes puedan llevar el apellido del padre y heredar sus bienes personales y ha considerado "sin fundamento" las informaciones al respecto, según el portavoz de la Santa Sede, el jesuita Federico Lombardi, que ha salido al paso de las informaciones publicadas ayer por el diario italiano La Stampa


"A las preguntas que me han hecho sobre ese artículo, en el que se afirma: "Por impulso de la Congregación para el Clero se han celebrado algunas reuniones para estudiar el tema de los hijos de sacerdotes y que han sido escuchados los pareceres de algunas personas", respondo que esas informaciones no tienen fundamento", ha dicho Lombardi en un escueto comunicado.


La Stampa ha informado de que la Santa Sede estudia medidas para los cada vez más numerosos casos de sacerdotes que viven en concubinato y tienen hijos y que entre las soluciones que baraja se encuentra la de garantizar a la prole el apellido del padre y que puedan heredar sus bienes personales.


Sudamérica y Austria

Según el matutino turinés, las pasadas semanas, impulsadas por la Congregación para el Clero que preside el cardenal brasileño Claudio Hummes, se celebraron varias reuniones para tratar este problema, que afecta, según el diario, especialmente a Sudamérica y a países europeos como Austria.


Siempre según ese diario, la Santa Sede "teme" que los reconocimientos de paternidad con las pruebas de ADN supongan "una avalancha" de procedimientos judiciales, que desemboquen en causas millonarias.


De ahí que "estudie" —publicó ayer el diario— medidas para garantizar los derechos sociales a la mujer y a los hijos "con una especie de contrato civil que permitiría a los hijos llevar el apellido del sacerdote-papá y heredar solo sus bienes personales".


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