9 de septiembre
Martes XXIII
Martes XXIII
Lc 6, 12-19 Pasó la noche orando a Dios
En silencio, en la oscuridad, en soledad, ante tu Padre, abandonado, en sus manos, corazón tendido, entregado, enternecido, desgranado, herido. Despojado de todo, de ti mismo, olvidado, dejado. Uno con él. Sin límites. Fuente e icono de nuestra oración en medio del bullicio sonoro y silencioso, de las multitudes errantes, de la fragilidad, de la limitación. Haznos, Señor, hombres y mujeres de oración, por tu misericordia. Como tú, contigo, en el Padre.
Luis Fernando Crespo SM
Dime una Palabra
No comments:
Post a Comment