A partir del jueves de la Semana Santa, que en 2012 recae en el 12 de abril para los cristianos ortodoxos, empiezan los preparativos de la celebración de la Pascua. Los creyentes ponen en orden sus viviendas, pintan huevos y cuecen la rosca y el pastel pascuales.
Antaño, para pintar huevos utilizaban la piel de cebolla. Hoy día, el adorno del huevo pascual es un arte tanto en Rusia como en el exterior. Estas fotos de RIA Novosti permiten seguir cómo un huevo ordinario se convierte en obra maestra.
Los más diestros logran transformar huevo en obra maestra con la ayuda de pincel y tintes.
Los huevos pascuales pintados se llaman “písankas” en Rusia.
En los huevos pascuales estampan imágenes de santos con la mayor frecuencia.
Hay quienes logran hacer un bordado en la cáscara del huevo.
El adorno de este huevo fue hecho con la ayuda de lana teñida
Para realizar tal labor se necesita mucha paciencia. Pero el resultado recompensa el esfuerzo invertido.
Difícilmente puede venir el deseo de romper un huevo tan hermosamente ornamentado.
Este método de pintar huevos consiste en aplicarle primero la cera. Cuando la cera se seque, el huevo se pinta y después se elimina la cera.
Hay países en que pintan hasta huevos de avestruz.
Quizá el método más complicado de adornar huevos pascuales es este. En cada huevo perforan de 2.500 a 3.000 orificios microscópicos, lo que puede llevar hasta una semana.
Tanto artesanos experimentados como niños se dedican a adornar huevos.
Luego que el tinte se seque, hay que frotar el huevo con aceite, para darle brillo.
RIA NOVOSTI
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