RD/Efe).-Mientras en toda América Latina crece la cantidad de sacerdotes, seminaristas, frailes y religiosas, en Argentina el número de vocaciones consagradas se redujo casi un siete por ciento, según un informe divulgado hoy por la prensa local.De acuerdo con los datos relevados por el Consejo Episcopal Latinoamericano (Celam) y publicados hoy por el diario La Razón, la caída se registró desde 2000 a 2005 y se mantuvo en los años siguientes, lo que ha generado preocupación entre los obispos del país.
El estudio determinó que en los 22 países latinoamericanos que integran el Celam los sacerdotes diocesanos, que no pertenecen a órdenes religiosas, aumentaron un 12 por ciento, al pasar de 37.884 a 42.405 en el periodo señalado.
En Argentina ese grupo creció sólo un 5,79 por ciento, ya que de un total de 3.608 sacerdotes que había en el país hace ocho años se pasó a 3.817 en 2005 y mientras las demás vocaciones crecieron en casi toda la región, en esta nación bajaron.
El número de sacerdotes de congregaciones cayó el 10 por ciento, el de seminaristas el 13, el de religiosas el nueve y el de frailes y hermanos el cuatro por ciento.
La reducción en el número de vocaciones es una de las principales razones por las que se organizó la V Semana del Seminario, que comenzó este domingo en una casa de formación de Buenos Aires y busca presentar la vocación sacerdotal 'como una posible y real opción de vida', indicó el diario La Nación.
Según el presidente de la comisión del Episcopado local que se ocupa de las vocaciones, monseñor Carlos Franzini, 'históricamente la Iglesia en Argentina tuvo un déficit de sacerdotes, nunca tuvo muchas vocaciones'.
'Hubo una especie de 'boom' vocacional en los años ochenta -agregó-, pero hoy nos preguntamos si fue genuino, porque después se dieron muchas salidas de seminarios y deserciones del sacerdocio. La falta de vocaciones tiene que ver con una tibieza de la vida cristiana de la comunidad toda, incluidos los pastores'.
El estudio del Celam señala un mayor interés religioso en países como Cuba, Venezuela y Paraguay, mientras que en Argentina los sacerdotes, religiosos y seminaristas en actividad en 2000 eran 18.047 y pasaron a ser 16.844 en 2005.
En ese periodo al grupo de sacerdotes argentinos se sumaron 669 jóvenes que fueron ordenados, pero se restaron los que colgaron los hábitos (144) y los que fallecieron (281).
Ese total de 425 casos de bajas coloca al país en el cuarto lugar en el ránking de caída de la cantidad de sacerdotes, precedido por México, con 973 bajas, Brasil, con 872, y Colombia, con 460 casos.
La reducción indicada por el Celam hasta 2005 se acentuó en los años siguientes en Argentina, ya que el total de quienes se preparan para el sacerdocio en los 33 seminarios del país bajó de 1.274 ese año a 1.184 en 2008.
Según fuentes del Arzobispado de Buenos Aires citadas por el diario La Nación, su titular y presidente del Episcopado argentino, cardenal Jorge Bergoglio, 'está muy preocupado' por la disminución de las vocaciones consagradas.
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