El arzobispo de San Salvador avala una educación sexual con valores morales
El pronunciamiento se da un día después de que se conoció que el ministro de Salud, Guillermo Maza, y la ministra de Educación, Darlyn Meza, firmaron en México un compromiso de revisar e implementar programas y políticas de salud sexual en las escuelas y colegios antes de 2010.
La Iglesia católica, en voz de su jerarca, monseñor Fernando Saénz Lacalle, expresó ayer en conferencia de prensa su rechazo contra la enseñanza del uso de preservativos en el sistema educativo nacional público y privado.
El pronunciamiento se da un día después de que se conoció que el ministro de Salud, Guillermo Maza, y la ministra de Educación, Darlyn Meza, firmaron en México un compromiso de revisar e implementar programas y políticas de salud sexual en las escuelas y colegios antes de 2010.
La iglesia está de acuerdo y apoya la idea de incluir la educación sexual en la currícula educativa, pero pide al Gobierno manejar con mesura la promoción de los preservativos para no caer en la permisividad sexual.
“Una gran preocupación que tenemos es el tema de la educación sexual. Me parece muy bien, con tal de que sea educación y no perversión sexual”, externó ayer Saénz Lacalle.
Por su parte, el ministro Maza dijo ayer que, pese a las incomodidades que genere el tema, el compromiso internacional incluye promover el uso de preservativos. (Lea entrevista aparte).
La iglesia no acepta el uso de métodos de planificación familiar fuera del matrimonio. Para Saénz Lacalle, la abstinencia sigue siendo el mejor método para espaciar los nacimientos y evitar enfermedades de transmisión sexual.
“Con respecto a los preservativos, me parece que es una estupidez inmensa y un suicidio terrible”, manifestó Sáenz Lacalle, quien se auxilió de explicaciones técnicas para validar su posición. Asegura que conoce estudios que hablan de que el uso de condón no garantiza la reducción de los embarazados o del VIH/sida.
“Las partículas de VIH/sida son tan mínimas que pueden pasar por los poros del preservativo. Quizás eliminan el 83% de posibilidad de infección, pero siempre hay un 17%. Incluso desde el punto de vista científico eso es un riesgo espantoso”, precisó.
El jerarca también cuestionó y puso en duda los estudios que sugieren el uso de preservativos. “No sé qué piensan los, entre comilla, científicos o preocupados por la salud. ¿No son ellos los que están provocando el contagio de enfermedades venéreas?”
Otros llamados
Instituciones internacionales como la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (CEPAL) y el Fondo de Naciones Unidas para la Infancia (UNICEF) ya lanzaron un llamado para que los países de Latinoamérica brinden servicios de prevención y suministren métodos oportunos de anticoncepción a los adolescentes.
Estas instituciones coinciden en que la promoción del uso de preservativos genera la reducción de las tasas de adolescentes embarazas. Solo en El Salvador, según datos del Ministerio de Salud, 7,568 niñas entre 10 y 14 años han dado a luz desde 2001 .
Al respecto, Saénz Lacalle opinó: “Sabemos que hay mucha presión internacional de organismos que quieren imponer leyes y que quieren imponer textos, pero hay que tener cuidado. No se trata de que queramos encerrarnos en una burbuja de vidrio, sino de que no se pervierta a los niños”.
El arzobispo anunció que la iglesia se integrará a la comisión anunciada por la ministra de Educación para estudiar los lineamientos de la nueva política educativa sobre salud sexual.
Lo que la iglesia pretende es cuidar el contenido de los textos que elabore y publique el MINED en coordinación con Salud.
“Hace falta ver cómo se van a cuidar los textos y cómo se va a formar a los maestros porque, desgraciadamente, en varios países hay una verdadera permisión sexual desde la escuela. Se trata de ser fieles a la naturaleza humana”, defendió el arzobispo.
La Iglesia católica plantea una educación en salud sexual que incluya educación en valores humanos. Monseñor sugirió complementar la salud sexual con una materia de valores morales.
“De manera que se estudien las virtudes humanas, que el hombre no es una persona que se deja llevar de los instintos, como los animalitos. El hombre y la mujer tienen inteligencia y voluntad. Deben de conocer lo que conviene y lo que no conviene. Formar verdaderamente a la persona”.
La iglesia también considera que los medios de comunicación del país no están ayudando a que se promueva una adecuada educación sexual. Saénz Lacalle hizo un llamado a una autorregulación en esa materia, tanto para prensa, radio como televisión.
“Debe haber un control de los medios. El hecho de que haya emisoras que tengan programas verdaderamente indecentes, groseros, asquerosos, repugnantes, provoca una poca educación de todo el pueblo”, criticó
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