En una ceremonia efectuada en la Catedral de Guadalajara presidida por el cardenal, Juan Sandoval Iñiguez, tres hermanos se ordenaron sacerdotes de la iglesia Católica. Durante la homilía, el arzobispo instó a los padres de familia a dejar que sus hijos ingresen al seminario y aseguró que hay muchos papás que van a misa e instruyen la religión pero no inculcan el deseo de la vocación sacerdotal por ser una labor que no reditúa económicamente.
A la hora de nombrarlos presbíteros el cardenal les besó las manos y después los vistieron con la estola y la casulla; indumentaria para celebrar misa. También se les otorgó un cáliz y una patena (para consagrar el vino y el pan).
Los hermanos, Alberto, Jesús y Andrés García Gutiérrez, tendrán diferentes labores en la iglesia, el primero se irá a Brasil de misionero, el segundo será vicario de la parroquia de San Eugenio Papa y el tercero, trabajará en el seminario de la ciudad.
Religión Digital
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