Lefebvrianos, la discusión sigue

La Congregación para la Doctrina de la Fe ha examinado la última respuesta de Fellay y las posturas de los otros obispos de la Fraternidad. Los próximos días el dossier en la mesa del Papa

ANDREA TORNIELLICIUDAD DEL VATICANO

¿Lo que esta mañana ha sucedido en la «Feria quarta», la reunión de la Congregación para la Doctrina de la Fe, representa un compás de espera en el camino hacia el acuerdo con la Fraternidad de San Pío X? Según parece, no. A pesar de que el recorrido presenta cada día una nueva dificultad. Lo que ha impresionado a los cardenales del antiguo Santo Oficio ha sido la publicación de la correspondencia intercambiada entre monseñor Fellay y los otros tres obispos.

Los padres de la «Feria quarta» de la Doctrina de la Fe han decidido de este modo extraer las posturas de los tres, que serán tratadas «individualmente y de manera separada». En esas cartas, los obispos han dejado por escrito su convencimiento de que «es imposible un acuerdo con la Roma actual» porque «tras el Concilio Vaticano II las autoridades oficiales de la Iglesia se han separado de la verdad católica». La publicación de las cartas, por voluntad muy probablemente de quien no desea regresar en plena comunión con Roma, ha obtenido su efecto.

En el encuentro de esta mañana se ha discutido sobre las peticiones de aclaración expresadas por Fellay y sobre los cambios propuestos por el mismo al texto final. Diversos cardenales –que hubieran preferido el texto precedente elaborado por la Congregación- han puesto objeciones y dado sus votos con reserva. El resultado de esta fluida discusión será entregado probablemente ya pasado mañana por el Cardenal William Levada, Prefecto del antiguo Santo Oficio, a Benedicto XVI. El dictamen de la «Feria quarta» no es vinculante, el Papa, que podrá examinar el parecer individual de cada uno de los miembros, puede decidir en plena autonomía.

Las observaciones de los cardenales serán comunicadas a Fellay en persona, para preparar el texto final del «preámbulo doctrinal» cuya firma podrá ratificar el regreso en plena comunión del superior de la Fraternidad y de los sacerdotes que lo sigan. No está dicho que deba pasar mucho tiempo, aunque todavía queda alguna dificultad por superar. Habrá que esperar todavía para saber cual será la decisión final del Pontífice. En las últimas horas se ha puesto en circulación una indiscreción  según la cual Benedicto XVI ha sido informado de modo preventivo de las peticiones de modificación del preámbulo doctrinal que el mismo Fellay le ha hecho llegar de manera oficiosa. Estos contactos informales, habrían tranquilizado al superior lefebvriano sobre el sustancial acuerdo de Ratzinger y serían el origen de las últimas declaraciones públicas y privadas realizadas por Fellay en persona recientemente, en las que varias veces ha subrayado la importancia del llamamiento del Papa.

Vatican Insider

División entre lefebvrianos frena regreso a Roma

16 de Mayo, 2012. (Romereports.com) Los cardenales y obispos de la Congregación para la Doctrina de la Fe no están satisfechos con la respuesta del sucesor de monseñor Lefebvre a la propuesta del Vaticano y han formulado “observaciones” para las futuras discusiones.

  

A diferencia del Superior General, Bernard Fellay, los otros tres obispos lefebvrianos se oponen al acuerdo con Roma. Por tanto, el Vaticano no los incluirá en la posible solución canónica, y deberán contactar por su cuenta a la Santa Sede si desean regularizar su situación. 

El cambio de rumbo en el proceso se produce tras la publicación de una carta de estos tres obispos al superior Bernard Fellay. Ahí le dicen que “el pensamiento del Papa está impregnado de subjetivismo”y que unirse al Vaticano es “ponerse en las manos de modernistas y liberales” . 

El padre Federico Lombardi, portavoz del Vaticano confirma que la solución de la fractura entre Roma y la Fraternidad de San Pío X “no es inminente”. O sea, que ahora que parecía todo resuelto, hay que seguir negociando.