“Navidad es decirle “no” a la indiferencia, “no” al bienestar propio sin tener en cuenta las urgentes necesidades de los demás, “no” a la pasividad frente a tantos urgentes desafíos”
Buenos Aires (Agencia Fides) – Los Obispos de la región de Patagonia-Comahue (Diócesis del Alto Valle, Comodoro Rivadavia, Neuquén, Río Gallegos, San Carlos de Bariloche y Viedma) han escrito un Mensaje de Navidad a todos los fieles en el que recuerdan que el canto que escucharemos en estos días “Gloria a Dios en las alturas y en la tierra paz a los hombres amados por Él”, constituye “un canto a la vida que nos despierta y lanza a ser misioneros, testigos y portadores de vida, de la vida plena, de la vida de los hijos de Dios” y que nos debe llevar a “descubrir nuestra responsabilidad frente a la paz y a la vida plena para todos, como frutos de ser amados por Él”.
Sin embargo, afirman los Obispos, hay muchos niños y adolescentes pero también adultos y ancianos para quienes “la vida les resulta un peso, un agobio”, muchas veces causado por la “gran ausencia de amor”, porque son conscientes de que “tan solo valen en cuanto pueden ser “útiles” para el bienestar de otros, que su vida no vale nada en sí misma”. Por ello, para los Obispos de la Patagonia será verdaderamente una Navidad cristiana, “si ese niño o niña que pasa hambre y que a veces es sometido a tantos atropellos encuentra una familia que se interesa y se preocupa por él... si ese adolescente o joven heridos por la violencia, las adicciones, la explotación sexual o la marginación, encuentra una comunidad que le ofrece una alternativa de cambio... si todo hermano o hermana, cuya vida es amenazada, encuentra “un prójimo” que con signos concretos le hace descubrir el valor de su vida”.
“Navidad – continua el Mensaje - es decirle “no” a la indiferencia, “no” a la seguridad garantizada por mayor castigo y represión, “no” al bienestar propio sin tener en cuenta las urgentes necesidades de los demás, “no” a la pasividad frente a tantos urgentes desafíos”.
El segundo punto en el que se centran los Prelados es la paz a los hombres recordando, según el Mensaje para la Paz 2009 del Santo Padre que “mirando a Cristo que en esta Navidad trae al mundo el don de la paz, no podemos dejar de asumir el compromiso de combatir la pobreza”. Pobreza que “golpea día a día a muchos” y de la cual “no podemos a la ligera descartar nuestras responsabilidades”.
Por ello, en esta Navidad “nuestro encuentro con Cristo que nos trae la paz no puede dejar de pasar por el camino de nuestro compromiso por combatir la pobreza”. Por último recuerdan la gran celebración del próximo 22 de diciembre de acción de gracias a Dios por el don de la paz argentino-chilena, gracias a la mediación papal.
“Celebrar este hito de nuestra historia – afirman los Obispos- debe llevarnos a renovar nuestra opción por el diálogo, como único camino de la paz”. Ciertamente en la nación en particular en la región patagónica “hay muchas heridas de ayer y otras más recientes que deben sanarse. El tiempo no basta para sanar”. El camino por ello, para sanar estas heridas “es el encuentro que exige aprecio mutuo, y que implica saber perdonar. Encuentro que se concreta en un diálogo sincero y en la búsqueda del bien común, renunciando a intereses mezquinos personales y/o sectoriales, optando por la vida plena de todos, sin excluir a nadie”.
(RG) (Agencia Fides 19/12/2008)
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