El Alto Comisionado de Naciones Unidas para los Refugiados (ACNUR) ha enviado un primer lote de tiendas de campaña para alojar a los refugiados somalíes que viven en Kenia y Etiopía. Las tiendas, que llegaron ayer a Nairobi, serán repartidas a 2.300 familias de desplazados en Dadaab, el campo de refugiados situado al noreste de Kenia, cerca de la frontera con Somalia. El martes se espera la llegada de 6000 tiendas más procedentes de Pakistán. ACNUR tiene previsto el envío de más de 20.000 tiendas a Adis Abebba. Esta operación pretende ayudar a los más de 430.000 refugiados somalíes en Kenia y Etiopía, de los cuales 164.000 han llegado a estos dos países en los últimos 6 meses. Cerca de 3.000 somalíes abandonan sus hogares cada día a causa de la inseguridad, la sequía y el hambre.
Tras una visita a las zonas más afectadas en el norte de Kenia, el director de Unicef, Anthony Lake, y el Secretario de Estado Británico para el Desarrollo Internacional, Andrew Mitchell, pidieron a la comunidad internacional la intensificación de los esfuerzos para salvar a los millones de personas afectadas por la hambruna que asola al Cuerno de África debido a la sequía. Más de 10 millones de personas se enfrentan al hambre tras una de las peores sequías de las últimas décadas.
"Es una crisis de causa mayor. No únicamente porque las necesidades inmediatas son grandes, sino porque es posible que la situación se agrave en los próximos seis meses y es poco probable que las próximas cosechas sean suficientes", ha declarado Lake. Si las condiciones de seguridad alimentaria no mejoran ante del inicio del año 2012, la situación de malnutrición podrá empeorar, según ha indicado el director de UNICEF. "Nos encontramos ante una verdadera tempestad en esta zona, provocada por el conflicto en Somalia, el incremento del precio del carburante y los alimento, así como por la sequía".Según UNICEF, más de 2 millones de niños sufren de malnutrición en el Cuerno de África y necesitan ayuda urgente para sobrevivir.
Mundo Negro
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