Meditando con los santos y beatos del día: B. JUAN BAUTISTA MACHADO Y PEDRO DE LA ASUNCIÓN

Hoy, 22 de mayo, la Iglesia conmemora el nacimiento para el cielo del BEATO PEDRO DE LA ASUNCIÓN, quien muriera martirizado en un día como hoy del año 1617, en Cori, Japón, durante la persecución religiosa contra los cristianos. Nacido en la pequeña ciudad de Cuerba, arquidiócesis de Toledo, España, fue sacerdote misionero de la Orden Menor de San Francisco. Hoy también la Iglesia recuerda al BEATO JUAN BAUTISTA MACHADO quien compartiera el martirio con el Beato Pedro de la Asunción. Nacido en el año 1580 en las Islas Azores, fue sacerdote jesuita misionero. El Papa Pío IX, en el año 1867 les dio el honor de los altares declarándolos Beatos. Unidos pues, a quienes con coraje arriesgan su vida por sus hermanos, brindemos nuestro vivo aplauso a los Beatos Pedro de la Asunción y a Juan Bautista Machado.
Meditación
Querido BEATO PEDRO DE LA ASUNCIÓN: al recordar tu vida, te encontramos apenas ordenado sacerdote, como maestro de novicios. Pero tu, guardabas en tu corazón un deseo aún más grande: partir hacia el Japón en misión evangelizadora. Y en compañía de tus hermanos, allí fuiste. Después de una breve estadía en las Filipinas, desembarcaste finalmente en Japón y, en la zona de Nagazaki desarrollaste un intenso apostolado. Años más tarde, allí mismo dirigiste el convento franciscano. Por tu santidad de vida fuiste muy estimado y buscado por los fieles. A tu confesional llegaban en tantos y esto, te obligaba a pasar horas y horas cumpliendo este ministerio. En esos años la situación religiosa en el Japón se agravó. Por orden de Taifusama, se desencadenó una furiosa persecución contra los cristianos y se decretó la expulsión de todos los misioneros extranjeros. Pero tu, preferiste correr el riesgo, y te quedaste. Y así, te dedicaste a asistir y alentar a los cristianos en este difícil momento. Por prudencia, te trasladaste a una localidad cerca de Nagasaki, pero en Chichitzu, alguien te traicionó... Fuiste capturado y conducido a la prisión de Omura y después, de Cori. Allí encontraste a tu compañero Juan Bautista Machado, con quien transcurriste tus últimos días en penitencia y oración. Radio Vaticano