Se han presentado cerca de 300 denuncias contra la Iglesia católica
"Los obispos belgas no se tomaron nada en serio esas denuncias de abusos"
De las cerca de 300 denuncias presentadas contra la Iglesia católica de Bélgica en la década de los 90 por abusos de sacerdotes católicos a menores, 15 han desembocado en admisiones de culpabilidad y están en estos momentos en los tribunales, informó hoy la radiotelevisión belga flamenca VRT.
De esas 300 denuncias, 15 son de "casos en que los miembros de la Iglesia belga (sobre todo sacerdotes) han admitido su culpabilidad", aseguró hoy el sacerdote belga Rik Devilé, que representa a las víctimas de esos abusos sexuales.
Según denunció Devilé, "los obispos belgas no se tomaron nada en serio esas denuncias de abusos. Como mucho, el sacerdote implicado en esos casos era amonestado por sus superiores, pero nada más, ahí quedaba la cosa".
Devilé fue uno de los fundadores del grupo de trabajo "derechos humanos en la Iglesia católica belga", que ha defendido a las cerca de 300 víctimas de pedofilia en el seno de la Iglesia católica belga entre 1992 y 1998. Ahora jubilado, Devilé mira con amargura esa época "triste" de la Iglesia belga, según cuenta a la prensa belga flamenca.
"De todos los casos de abusos a menores que presentamos, sólo 15 fueron admitidos a trámite, es decir apenas un cinco por ciento del total. Es una vergüenza que la jerarquía de la Iglesia belga se haya lavado las manos en este asunto tan grave", asegura con pesar.
La Iglesia católica y el Papa Benedicto XVI, se enfrentan a un momento especialmente duro por el elevado número de casos que se han ido destapando en las últimas semanas en relación a casos de pedofilia en el seno de esa institución.
(RD/Agencias)
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