Matrimonios precoces
Alsan N´Canha tiene 20 años. Huyó de su casa en Foya, en la región de Quinará, en el sur de Guinea Bissau, con sólo 16 años, porque no se quería casar con un hombre de 50 años, escogido por su familia. “Fui torturada y fui a parar al hospital de Tite”, relata. “Huí durante una de las estancias en el hospital. Recorrí 100 kilómetros a pie y canoa hasta la isla de Bolama, donde encontré un refugio provisional en la misión evangélica local antes de ser enviada a este hogar”.
El hogar al que Alsan se refiere es Lar Abigail, en Bissau, creado por la iglesia evangélica en 2003. La iglesia evangélica es hoy la principal institución de acogida de jóvenes que huyen de esta práctica. “Creamos este hogar para proteger, educar, formar y reintegrar a las niñas víctimas del matrimonio precoz”, explica el pastor Joaquim Correia.
Segun Correia, hay niñas que, por negarse al matrimonio, son sometidas a castigos corporales e incluso están amarradas durante días, sin comer. “Someter a niñas de 12, 14 años al matrimonio limita su esperanza de vida. Tenemos que cambiar esto en el seno de la familia”, comenta. “Para muchas, el matrimonio precoz conlleva problemas de salud, incluyendo el riesgo de HIV. Hay también casos de niñas que murieron durante el parto.”
Con el cuerpo aún en desarrollo, las niñas no tienen todavía una estructura física para un embarazo. Una consecuencia habitual es la fístula, en la que los tejidos de vejiga, recto, vagina y útero se rompen, causando perforación e incontinencia urinaria y fecal.
Fanta Kassama, de la etnia mandinga y 15 años de edad, se casó a los 12 con un hombre de 70. “Yo no quería, pero mi madre sería maltratada físicamente o expulsada de casa por mi padre, entonces me casé”, cuenta.
Esta práctica siempre estuvo presente en la vida cotidiana de varias etnias mayoritarias en el país, pero la crisis económica que se arrastra desde el conflicto armado en 1999 es señalada como uno de los principales factores para el matrimonio precoz. Kalifo Djallo, régulo (líder) del barrio Dobala, en Gabu, también señala: “Con la explosión demográfica, no hay formación ni empleo”, explica. “Quien no sabe leer y tiene cuatro hijas, las va a dar en matrimonio. La mujer es mano de obra. Es un medio económico”.
Hay también razones culturales tras esta práctica. “El matrimonio precoz es un hábito, no necesariamente ligado a la pobreza”, dice el régulo Djallo. En muchos casos, la unión es acordada entre los padres y el pretendiente cuando nace la niña. A partir de entonces, los padres pasan a recibir la dote –dinero, favores y animales– de la familia del futuro yerno. “Así, cuando ella comienza a hacerse mujer, los padres no tienen más alternativa que obligarla a casarse con dicho hombre”, explica el pastor Correia.
El Código Civil guineano, elaborado en la época colonial pero aún en vigor, apoya la práctica, permitiendo el matrimonio a las niñas a partir de los 14 años y a los niños a partir de los 16.
Afrol News/Plusnews, 7 de septiembre de 2007
Ampliando miras: MATRIMONIOS PRECOCES
El 36% de las mujeres del mundo de 20 a 24 años se casaron o se unieron a sus parejas antes de cumplir los 18 años (es lo que se entiende por matrimonio infantil).
Alrededor de 14 millones de adolescentes entre 15 y 19 años dan a luz todos los años. Las niñas menores de 15 años tienen 5 veces más probabilidades de morir durante el embarazo que las mujeres mayores de 20 años. Si una madre tiene menos de 18 años, la probabilidad de que su bebé muera el primer año de vida es un 60% mayor que la de un recién nacido de una madre de 19 años. Incluso si el bebé sobrevive, existe una mayor posibilidad de que sufra de bajo peso al nacer y de un retraso en el desarrollo físico y cognitivo. En España 23.000 menores se quedan embarazadas cada año. (UNICEF, Estado Mundial de la Infancia 2007)
Gesto para hoy: Dedica un rato esta tarde a una adolescente. Si puedes comenta con ella los problemas de los embarazos precoces.
Oración:
Padre, tú que eres Amor,
restablece los caminos del amor verdadero
entre el hombre y la mujer.
Que las adolescentes puedan disfrutar de su juventud
Que las adolescentes puedan disfrutar de su juventud
sin estar sometidas a un maridoni a una maternidad sobrevenida.
Amén.
Más información de Guinea Bissau, aquí
Fuente: Aágora Marianista
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