Más de 200.000 peregrinos llenan el Circo Máximo en la vigilia previa a la beatificación

Más de 200.000 peregrinos llenan el Circo Máximo en la vigilia previa a la beatificación

Benedicto XVI conectó por vídeo con los asistentes al término de la ceremonia


J. B./Agencias).- "Juan Pablo II os está mirando desde el cielo, y sonríe". Las palabras de Sor Marie Simon, la religiosa cuya inexplicable curación de parkinson sirvió para documentar el milagro que mañana llevará a los altares a Karol Wojtyla, marcaron una velada fría, que fue calentada por los cantos y los aplausos de más de 200.000 peregrinos, que se han dado cita en el Circo Máximo de Roma. La vigilia de oración contó con la presencia de un centenar de cardenales, varios cientos de obispos y una marea humana donde los españoles fueron mayoría, y que se cerró con una breve intervención de Benedicto XVI vía vídeo.

La vigilia arrancó con la retransmisión de un vídeo de Juan Pablo II en la Jornada Mundial de la Juventud celebrada en Roma en el año 2000, en el que el Papa polaco recordó un proverbio polaco que dice que "si tu vives con los jóvenes, tendrás que ser también joven" y afirmó que "Roma ha sentido este entusiasmo y Roma no lo olvidará nunca".

Tras el video, el coro de la diócesis de Roma y el coro 'Santa Cecilia', dirigidos por monseñor Marco Frisina, ha cantado una de las canciones de la Jornada Mundial de la Juventud de Toronto, celebrada en el año 2002, la última presidida por Juan Pablo II.

La primera parte de la vigilia, llamada 'Celebración de la Memoria', estuvo marcado por los recuerdos de Juan Pablo II, con los testimonios del secretario personal del Pontífice, el ahora arzobispo de Cracovia, el cardenal Stanislaw Dziwisz y el ex portavoz de la Santa Sede, el español Joaquín Navarro-Valls. También participó la religiosa Marie Simon-Pierre.

La religiosa relató el proceso de su enfermedad, su invocación a Juan Pablo II y su milagrosa curación. "Cuando murió, tuve la impresión de perder a un ser querido". Sus palabras fueron seguidas bajo un sobrecogedor silencio, solo roto cuando concluyó diciendo "Juan Pablo II os mira y os sonríe".

Por su parte, quien fuera su portavoz durante 22 años, Joaquín Navarro-Valls, se dirigió directamente al pontífice que mañana será beato. "Gracias por la obra de arte que Dios ha hecho de tu vida". Navarro recordó a los jóvenes que "la iglesia no hace a los santos, simplemente confirma que la vida de una persona fue santa".

Finalmente, Dziwisz recordó los momentos que vivió, de cerca, tanto en la vida como en los últimos momentos de la misma. "El ha dado testimonio con su muerte, nos ha enseñado cómo muere un cristiano".
"Ví dos veces enfadado de verdad a Juan Pablo II. La primera, en Agrigento, cuando gritó contra la mafia. Y la segunda, durante el Angelus, antes de la guerra de Irak. Dijo, con mucha fuerza: "No a la guerra, la guerra no resuelve nada. La paz. Yo he vivido la guerra, sé lo que es la guerra, y las cosas no se resuelven así".
La primera parte concluyó con el canto 'Totus Tuus' que fue redactado por el 50 aniversario de Ordenación Sacerdotal de Juan Pablo II.

Durante la segunda parte, se rezaron los 'Misterios Luminosos' del Rosario, instituidos por Juan Pablo II. Este rosario se celebra en conexión vía satélite con cinco santuarios marianos, que rezarán con los peregrinos de Roma uno de los misterios por una intención ligada a la figura de Juan Pablo II.
El primer misterio se reza en conexión con el santuario de Lagniewniki, en Cracovia, por la juventud. El segundo misterio se reza por la familia y esta en conexión con el santuario Kawekamo-Bugando (Tanzania). Desde el santuario de Nuestra Señora del Líbano-Harissa, los peregrinos rezan por la evangelización y desde la basílica de Santa María de Guadalupe, en México, se reza por la esperanza y la paz de las naciones.
El último misterio está en conexión con el Santuario de Fátima, ligado profundamente a Juan Pablo II y en el que se reza por la Iglesia. El Papa Benedicto XVI imparte la bendición a los participantes en torno a las 22,30 horas de la noche a través de un video en directo desde su estudio del Palacio Apostólico del Vaticano.
Por último, la vigilia de oración finaliza con el canto del 'Salve Regina' y los miles de peregrinos del Circo Máximo encienden velas "como signo de gloria a Dios y devoción a la Virgen María", según ha explicado monseñor Marco Frisina.

La diócesis de Roma celebrará durante la noche del 30 de abril lo que el Vicario de Roma, el cardenal Agostino Vallini ha denominado 'noche blanca de las iglesias', durante la que estarán abiertas ocho iglesias del centro de Roma --la iglesia de Santa Inés, San Marcos del Campidoglio, Santa Anastasia, la Iglesia del Jesús, Santa María en Vallicella, San Juan de los florentinos, San Andrés de la Valle y San Bartolomé de la Isla, que se encuentran en el recorrido desde el Circo Máximo a la Plaza de San Pedro.

En estas iglesias se celebrarán Adoraciones eucarísticas y conciertos como preparación para la ceremonia de beatificación, que se celebrará al día siguiente en la Plaza de San Pedro, que abrirá a las 5.30 de la mañana.
Estas horas de oración estarán animadas por grupos de jóvenes de la diócesis de Roma y durante las cuales se leerán diferentes frases y textos de Juan Pablo II, según ha informado el Director de la Oficina de las Comunicaciones Sociales de la Diócesis de Roma, monseñor Walter Insero.